Nací en Valladolid.
Soy licenciada en Historia por la Universidad de mi ciudad
natal. Ejercí como profesora de Enseñanza
Secundaria en otras tierras, pero al cabo del tiempo volví
a mis orígenes donde compagino mi actividad docente
con el ejercicio de la pintura.
Por herencia, por afición
y por docencia, siempre me ha atraído el mundo
del arte, pintar es mi sueño y cuando las circunstancias
lo permitieron, me entregué a fondo. Era mi asignatura
pendiente.
Como Gauguin, mi dedicación
al mundo de la pintura es tardía, pero no por ello
menos intensa. La pintura se ha adueñado de mí,
como un amor tardío, que sabe que ha cogido el
último tren.
Mi obra es, hoy por hoy,
preferentemente de paisajes. España entera posee
bellos rincones para inspirar al artista, por tema y por
colorido, sobre todo esta Castilla nuestra, cuya gama
cromática es un reto para la paleta de cualquier
pintor.
Pedro mis cuadros no son
sólo la representación formal de lugares
y paisajes, elegidos al azar, son el escenario de una
vivencia mía, de un recuerdo (el
caminar de mi abuelo).
Pintura y sentimiento se fusionan en los pinceles con
la luz y el color.