07-12-05
- De veinte nacionalidades
El número de inmigrantes empadronados en la localidad se
ha cuadruplicado en solo cinco años
Texto de/Ana Álvarez.
Fotografía de Fran Jiménez.
Cada
día se tramitan en Medina del Campo una media de quince
documentos de extranjería
en las dependencias de la Comisaría Nacional de Policía.
Este movimiento administrativo puede ayudar a hacerse una idea
aproximada del volumen potencial de población inmigrante
que hoy en día convive en esta población vallisoletana
que supera los veinte mil habitantes y cuyo reflejo en el censo
se traduce en la actualidad en 590 personas.
Partiendo
de los datos ofrecidos por fuentes de la Administración
local, este colectivo se ha cuadriplicado en la villa a lo largo
de los últimos cinco años, una evolución
que reflejan los 135 inmigrantes empadronados en el Consistorio
medinense en el 2001, los 249 del año siguiente y los 341
y 439 registrados en el padrón municipal en los dos años
posteriores, cifras que permiten observar un incremento medio
anual de casi cien personas.
El
origen de estos ciudadanos, en su mayoría jóvenes,
hombres y mujeres en similares porcentajes, y dentro de un perfil
de inmigración familiar, es muy variado y su procedencia
se reparte entre distintos continentes y más de veinte
países, entre los que predominan los sudamericanos y los
del Este europeo.
Como
dato anecdótico, también hay personas de origen
tailandés, sirio e, incluso, quien ha venido a parar a
la Villa de las Ferias desde las Islas Maldivas, aunque el volumen
de estas procedencias es muy bajo si se compara con el de China,
un buen número de países latinoamericanos, como
Colombia, República Dominicana, Venezuela o Chile, entre
otros países de la Europa del Este, como Rumania o Ucrania.
Recomendación
inicial
Desde
los servicios del Centro de Acción Social (CEAS) del Ayuntamiento
de Medina del Campo se ofrece al inmigrante una recomendación
jurídica inicial, que se efectúa en la primera cita
de recepción y tiene como base la situación legal
de residencia o trabajo. Después se le aconseja su inscripción
en el censo para poder acceder a las diferentes prestaciones municipales,
entre las que se encuentran la información y la formación,
así como el asesoramiento en la resolución inicial
de trámites documentales como la tarjeta sanitaria, la
demanda de empleo o la escolarización, en el caso de que
los usuarios tengan menores a su cargo.
El
CEAS también tramita ayudas para familias necesitadas y
el Ingreso Mínimo de Inserción de la Junta de Castilla
y León, a la vez que coordina el Plan Municipal de Exclusión
Social, en colaboración con la Asamblea Local de Cruz Roja
y Cáritas Interparroquial, y el Programa de Habilidades
Parietales, un seguimiento de menores escolarizados que se realiza
dentro del programa para la Infancia y a través de Cáritas
tres días por semana en la sede de esta institución
solidaria, en la calle San Martín.
Junto
a estos programas de apoyo al ciudadano inmigrante, también
hay que destacar el Plan de Empleo y la Red Interlabor@ que desarrolla
Cruz Roja en Medina del Campo, a través de los cuales se
organizan cursos monotemáticos especializados en oficios
demandados por la industria local, que son complementados con
clases de español para extranjeros y tienen como objetivo
la ampliación de posibilidades de inserción laboral
del colectivo.
Un
curso de cocina básica española y manipulación
de alimentos reunió el mes pasado a quince personas, en
su mayoría mujeres rumanas, búlgaras y marroquíes,
en la última iniciativa de formación laboral organizada
por la Asamblea Local de Cruz Roja, con la colaboración
del colegio San Juan de la Cruz.