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02-11-18 - Encuentro en Ávila con Charles Clifford (1819-1863). El primer fotógrafo que retrató la ciudad

Ávila se reencuentra con su antigua imagen decimonónica en la exposición del visionario fotógrafo inglés Charles Clifford (1819-1863).

Exposición de Clifford, primer fotógrafo que retrató la ciudad.

En el Observatorio Activo Ávila 1131, de Fundación Tatiana Pérez Guzmán el Bueno, en la calle Caballeros, hasta el 17 de noviembre lucen nueve positivos de Clifford, procedentes de sus fondos (seis son vistas Segovia, Toledo, Ávila y Madrid, y tres son reproducciones de pinturas), estudiados y presentados por Santiago Sáenz Samaniego, siendo éste el motivo que nos permite acercarnos, una vez más, a su figura legendaria en la historia de la fotografía, si bien ello hacemos de forma independiente o complementaria a esta muestra.

Charles Clifford (1819-1863), fotógrafo británico afincado en Madrid desarrolló una actividad caracterizada por una voluntad decidida por retratar las ciudades monumentales españolas en una labor extraordinariamente documental que se anunciaba como «Fotógrafo de la Reina de Inglaterra, de los Reyes de España, del Emperador de Francia, del Emperador de Rusia y del Duque de Montpensier».

Además, Clifford fue cronista gráfico de los viajes reales que hizo Isabel II y de las grandes obras públicas de su época, la construcción del ferrocarril y del abastecimento de agua a Madrid. También se ocupó de retratar a las personalidades de la corte, de hacer reproducciones artísticas de los cuadros más notables, y de atender encargos de celebridades aristocráticas para hacer reportajes. Finalmente, la formación de lujosos álbumes para sus patrocinadores es uno de los mejores testimonios de su trabajo (Fontanella, 1999).

También fue aeronauta de caballería con ascensiones en globo, daguerrotipista al método inglés, retratista, fotógrafo de pinturas, innovador e instructor de técnicas fotográficas, explorador artístico, vendedor de aparatos, y reportero de la Corte, fue el primer fotógrafo de la historia que retrató Ávila.

Y después de visitar Ávila, Clifford anotó en su Scramble, la guía de su expedición artística donde recupera su viejo proyecto de crear un álbum monumental de España y donde la ciudad debía ocupar un lugar importante:

«Ávila es un ejemplar muy interesante e imponente de las antiguas ciudades castellanas sobrias. Sus murallas se encuentran en buen estado de conservación».

Expedición de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Primeras fotos de Ávila, Charles Clifford, 1853

En su obra destaca la imagen de la ciudad y su recinto amurallado con síntomas de desmoronamiento en una vista delimitada por el muro de piedra que define el cordel de Las Moruchas próximo a la carretera de Salamanca. Lee Fontanella (“Clifford en España”, Ed. El Viso, 1997 y 1999) quiso ver en el lugar desde donde se tomó la fotografía impactos autobiográficos del autor, y es que entonces corría el año 1860 cuando Clifford estaba atraído por una  vocación artística y aventurera, al margen de su trabajo como reportero de acontecimientos regios o de las importantes obras públicas que se promovían por la corona en la España de Isabel II.

En esta ocasión, la simple vista de las murallas transporta al visionario varios siglos atrás, y a partir de ahora la perspectiva  de la ciudad que fijó Clifford será uno de los temas fotográficos más definitorios de Ávila. Otras tres imágenes que hizo en esta época lo fueron del Mercado Grande, del cimorro de la Catedral, y de la fachada principal del templo catedralicio, fotos que se conservan en el Ayuntamiento abulense (JM Sanchidrián, “La Muralla de Ávila”, Piedra Caballera, 2007).

En 1853, Clifford había visitado la ciudad acompañando a los estudiantes de arquitectura de la Escuela de Bellas Artes de San Fernando que se dirigían a Salamanca, ocasión en la que retrató la iglesia de San Vicente y la catedral. Ávila aparece entonces como el primer destino de la expedición artística que dirgía el joven arquitecto Francisco Jareño con la colaboración artística del fotógrafo Charles Clifford.

El viaje se enmarcaba en el proyecto  de los Monumentos Arquitectónicos de España que debía estar formado por catálogos, dibujos y descripciones de los monumentos y antigüedades de nuestro patrimonio histórico artístico, donde la fotografía cumplirá entonces una importante función auxiliar en la más ambiciosa obra editorial del siglo XIX.

Costado de la catedral de Ávila

El periódico madrileño El Heraldo se hace eco de la expedición artística los días 24 y 28 de mayo de 1853, y la noticia que reproduce El Clamor Público al día siguiente reseñando su paso por Salamanca, lo que también sirve para Ávila, en los siguientes términos:

«Esta sombría y desierta población se halla  algún tanto animada de dos semanas a esta parte por la venida de diez y ocho jóvenes alumnos de la escuela de arquitectura de Madrid. Se hallan pensionados por el gobierno para estudiar las muchas preciosidades artísticas que contiene esta antigua ciudad, verdadero tesoro de la arquitectura de la edad media. Al frente de la expedición está un joven recién venido de Roma, donde ha permanecido cuatro años con el carácter de pensionado. También figura dignamente entre los artistas viajeros mister Clifford, fotógrafo inglés de extraordinario mérito».

Las fotografías tomadas por Clifford en la expedición fueron recopiladas en el álbum titulado Photografías formado por 32 vistas en papel a la sal conservado en la Academia de San Fernando (Archivo RABASF, Leg. 32-5/1), siendo cuatro las fotografías de Ávila, de las cuales una es de la fachada norte de la catedral tomada desde el cubo de la muralla de la puerta de San Vicente, y las tres restantes de las fachadas sur, este y oeste de la basílica de San Vicente en obras de restauración que por entonces dirigía el arquitecto Hernández Callejo con seguimiento de la Real Academia de Bellas Artes.

Las vistas de Ávila fueron la primera toma de contacto con la atractiva ciudad medieval que se pretendía documentar y preservar, cuya representación gráfica se había recreado diez años antes en ilusorios dibujos del pintor Francisco de Paula Van Halen, los cuales guardan parecido con las perspectivas que luego fotografió Clifford, aunque no será hasta 1860 cuando se tomen las vistas que utilizadas en el catálogo monumental que se estaba gestando.

La monumentalidad de Ávila no podía pasar desapercibida para los ilustrados del siglo XIX, como prueba su inclusión en la extraordinaria obra representativa de la España artística y monumental que se publicó por la Calcografía Nacional en el periodo 1859-1882 con el título Monumentos Arquitectónicos de España.

Abside la de Basílica de San Vicente

En dicha obra figuran representados y diseccionados en todo su esplendor los principales  monumentos de  Ávila, como son la Catedral, la iglesia de San Pedro, la basílica de San Vicente, la ermita de San Segundo, el convento de Santo Tomás, la iglesia de San Andrés y la iglesia de San Isidoro, sumando un total de ocho ilustraciones.

Entre estas maravillosas láminas sobresale, por su grandiosidad, una cromolitografía realizada por J.M. Mateu del ábside de la catedral, cuya vista es la misma que fotografió Clifford en 1860.

Fachada de la Basílica de San Vicente

Los puntos de encuentro abulense en la fotografía de Clifford se hallan en las vistas de la ciudad, en el puente de Arévalo, y en otras de personajes o de temática relacionada con Ávila. Entre estos últimos ejemplos nos recuerdan a Ávila las realizadas en Medina del Campo de la “Puerta de Ávila” y el “Castillo de la Mota”, lugar donde residió y murió Isabel la Católica, o en Salamanca de su universidad donde destaca la figura de los Reyes Católicos en el medallón labrado en su fachada.

Así mismo, la imagen del Alcázar de Segovia nos trae a la memoria su relación con los reyes castellanos Juan II y su hija Isabel nacida en Madrigal de las Altas Torres. También la obra del orfebre Juan de Arfe, autor de custodia de la catedral de Ávila, se puede contemplar en la cruz de plata que se conserva en la Granja de San Idelfonso que fotografió Clifford.

Para identificar Ávila o lo abulense o, mejor aún, el ambiente campestre de esta tierra o el espíritu de sus personajes históricos en la fotografía de Clifford, debemos acudir  a los retratos que hizo de cuadros y pinturas, un género, el de las reproducciones artísticas, en el que fue pionero en España. Igualmente, también llama la atención la representación gráfica de las fotografías de Clifford en los medios impresos donde Ávila se hace querer.

La actividad de reproducción de cuadros y pinturas debió constituir una parte importante del trabajo desarrollado por Clifford, de ahí que se anunciara para este fin (El Clamor Público 29/07/ 1851; La Iberia, 21/07/1858).

Deteniéndonos en las obras pictóricas que retrató Clifford, descubrimos entonces entrañables complicidades entre Ávila y los pintores cuyos cuadros fotografió, donde sobresalen los nombres de Goya, autor “La era”, ambientada en Piedrahita que retrató;  Dionisio Fierros, retratista de Santa Teresa; Vicente Manzano cuando recrea a los Reyes Católicos; Parcerisa, litógrafo de los monumentos de Ávila; los coleccionistas y también pintores Manuel Castellano y Valentín Carderera que dibujaron Ávila; Luis López Piquer, quien en “La Coronación de Quintana” contó con la presencia en el acto del escritor y diputado abulense Eugenio de Tapia García; y Suárez Llanos, retratista del poeta arevalense Eulogio Florentino Sanz, de Enrique Mélida Alinari, pintor de la iglesia de San Pedro de Ávila, Sagasta presidente de gobierno y asiduo visitante de Ávila, de Castelar, cuyo nombre lo fue también en Ávila de la actual plaza de Italia, y de Pedro Antonio de Alarcón, afamado escritor que visitó la cidudad.

De la misma manera, las fotografías de Clifford, hasta teinta y cinco, fueron reproducidas en El Museo Universal por importantes dibujantes, grabadores y litógrafos de la época, quienes también se ocuparon de la representación artística de Ávila, como fueron Federico Ruiz, Tomás Capuz, Cecilio Pizarro, José Severini y Bernardo Rico.

Puente del ferrocarril sobre el río Adaja a su paso por Arévalo. Foto Clifford, año 1858. Colec. Particular

La efervescencia periodística que tiene lugar en Madrid durante el tiempo en que Clifford realizó su actividad fotográfica en España, propició entonces numerosas referencias de la misma aparecidas en la prensa madrileña durante 1850-1863, algunas de las cuales coinciden con breves apuntes que de Ávila se publican.

A través de ellos, nos asaltan pequeñas notas sobre esta tierra abulense, sobre su historia, sobre la lucha en las Cortes por conseguir el paso de la línea del ferrocarril del Norte por la capital, sobre algunos de sus personajes legendarios y otros relevantes de la política, la religión, el arte o la cultura, sobre la reivindicación por salvar el monasterio desamortizado de Santo Tomás, y sobre las populosas visitas reales.

Así pues, observamos que en las páginas de El Museo Universal del 30 de octubre  de 1857 Ávila ocupa un lugar destacado en la Exposición de Agricultura. El periódico, incluye un bello grabado de Bernardo Rico por dibujo de Francisco Ortego de un  toro de cinco años de  raza pura española, premiado en su categoría, procedente de Mesegar de Corneja.

Ello sirve para  resaltar la participación  abulense en la exposición internacional que se celebra en Madrid, y en la que, según el periódico, también llamó la atención una yunta de Tornavacas y otros ejemplares vacunos de Ávila, Navaescurial, Bonilla y Piedrahita; lo mismo que los vinos abulenses que se destacan en el periódico del 15 de diciembre.

Curiosamente, en la misma exposición agrícola participa Clifford con la exhibición de 24 vistas de las obras del Canal de Isabel II, lo que mereció una mención honorífica (El Museo, el 30/11/1857).

Fotos de Ávila. Clarles Clifford, 1860 Colec. Ayuntamiento de Ávila

El Mundo Pintoresco, en el número del 1 de agosto de 1958, reseña el viaje de los reyes a Castilla, León, Asturias y Galicia, en cuya expedición les acompaña Clifford. La crónica del periódico apunta  el saludo y la recepción que en la lejanía Ávila hizo a la comitiva real, a la vez que resalta la valentía guerrera de la ciudad de  tiempos pasados.

Y antes de que la comitiva regia llegara a Valladolid, las autoridades de Ávila se desplazaron hasta el puente de Almarza para recibirla, prosiguiendo luego hasta Adanero donde el Ayuntamiento de Arévalo ofreció un lucido refresco, dice el cronista Juan de Dios de la Rada. Clifford, entonces, se apartó un pequeño tramo del trayecto que iba por Olmedo y se acercó hasta Arévalo, donde fotografió el nuevo puente del ferrocarril que se estaba construyendo.

Con ocasión de este viaje, El Museo Universal del 30 de agosto de 1858 inserta tres fotografías en grabado de la capital vallisoletana “gracias a la actividad de nuestros corresponsales y señaladamente del distinguido artista don Carlos Clifford, fotógrafo de S. M., que ha acompañado a la corte en esta expedición hasta Valladolid como encargado de sacar las principales vistas”, dice el periódico.

La comitiva real inauguró en este viaje la colocación de la piedra clave del puente del ferrocarril levantado sobre el río Pisuerga, unas obras que meses después también fueron celebradas en Ávila el 4 de diciembre del mismo año presididas por el obispo Fernando Blanco Lorenzo y el gobernador Eustaquio de Ibarreta.

CRONOLOGÍA BIOGRÁFICA DE CHARLES CLIFFORD (1819-1863)

1819. Nace en Gales del Sur (Gran Bretaña).

1850. Ya casado con Jane Clifford, la familia con un hijo de dos años figura como residente en Madrid en la C/ Alcalá, 4.

Se anuncia en la prensa madrileña como aeronauta protagonista de ascensiones en globo en la plaza de toros de Madrid, y como fotógrafo daguerrotipista con estudio en la calle Alcalá, núm. 4, donde ejerce como retratista según el “método inglés”.

1851. En diciembre, los señores Clifford habían establecido su residencia y laboratorio en Puerta del Sol, nº 11. Posteriormente se trasladan al Pasaje de Murga de la  calle de la Montera, nº 45 donde Clifford empieza a utilizar el proceso calotípico.

En  El Clamor Público se anuncia como retratista de grupos, vistas y reproducciones de cuadros, y además como instructor de métodos fotográficos.

1852. Publica un precioso álbum que se conserva en el Palacio Real de siete fotografías dedicado a la reina Isabel II con el título:

Copia talbotípica de los monumentos erigidos en conmemoración del restablecimiento de S.M. y la presentación de S.A.R. la Princesa de Asturias en el templo de Atocha, el día 19 de febrero de 1852.

1853. Se establece en la calle San Jerónimo, nº 39. Es nombrado “Fotógrafo de la Real Casa”, para la que realiza el álbum  San Idelfonso: Palacio y fuentes monumentales del Real Sitio de la Granja de Segovia.

Acompaña a los estudiantes de arquitectura de la Academia de Bellas Artes de San Fernando en la “Expedición artística a Salamanca y Ávila” y realiza un álbum de  32 vistas en papel a la sal titulado  Photografías, donde se incluyen cuatro imágenes de Ávila, una  de la catedral y tres de San Vicente. De este viaje se hicieron eco El Clamor Público y El Heraldo.

Realiza un amplio reportaje de Madrid, El Escorial, Segovia, Toledo y Burgos, que expone en el establecimiento madrileño La Corona de Oro.  En Madrid fotografía la Fuente de la Cibeles, diosa esculpida por Francisco Gutiérrez Arribas (1724-1782), un abulense natural de San Vicente de Arévalo

1854. Colabora con la Photographic Society de Londres, donde expone algunas de sus fotografías, de lo que se hace eco el periódico francés La Lumiere del 29 de abril, así como del álbum que prepara de su viaje por España.

Retrata varias ciudades españolas: Salamanca, Zamora, Benavente, Valladolid, Medina del Campo, León, Granada, Sevilla y Oviedo.

En Sevilla, el periódico El Porvenir anuncia que los motivos de su viaje son buscar suscripciones al Álbum Fotográfico de España,  la venta de fotografías sueltas, la toma de vistas y monumentos de la ciudad, y la reproducción de cuadros.

Conoce a Antonio de Orleans, duque de Montpensier, uno de sus mejores clientes y patrocinadores.

Fotografía diversas pinturas de Murillo en la Catedral y en el Museo de Bellas Artes de Sevilla, así como la obra de Zurbarán dedicada a Santo Tomás.

En el Museo del Prado retrata varias pinturas de Rafael.

En otoño se encuentra en Crimea, durante la guerra que enfrentó al Imperio ruso contra la alianza de Inglaterra, Francia, el Piamonte y Cerdeña, y el Imperio otomano. Del viaje se conservan varias vistas del campo de batalla y de la ciudad de Sebastopol realizadas  a partir de negativos en papel encerado.

1855. Los periódicos Bellas Artes y  La España  publican que Clifford marchará a París y Londres con la protección del Emperador de los franceses y su Reina, para dar  comienzo a la publicación monumental de España más vasta que se ha conocido. La España también reseña las numerosas fotografías realizadas en su reciente viaje por Andalucía de Murillo y otros autores, así como de los retratos que ha hecho de personalidades de la corte.

Inicia un extraordinario reportaje de las obras del Canal de Isabel II.

1856. Fija su residencia y laboratorio en la Cava Alta, nº 1, c/v a la calle Toledo.

Abandona el calotipo y comienza a experimentar con el colodión, lo que le facilita divulgar su obra por toda Europa.

Realiza un álbum  de 46 imágenes donde se incluye una copia del cuadro de Goya que titula Vista de una era de labradores inspirado por el pintor en la localidad abulense de Piedrahita titulado.

Vistas fotografiadas de la Alameda, del Palacio de Madrid, del de Guadalajara y de la Casa de los Mendozas en Toledo (hoy inclusa) pertenecientes al Excmo. Sr. Duque de Osuna y del Infantado sacadas por Mr. Clifford.

Entra formar parte de la “Societé Française de la Photografhie”.

Inicia su colaboración con en el periódico inglés Ilustrated London News con fotografías reproducidas en grabados, como la publicada e 2 de agosto del torero Puceta.

Participa en la Exposición Fotográfica de Bruselas  de este año obteniendo una mención honorífica.

Publica en París el álbum Voyage en Espagne con 400 fotografías.

La Lumière  del 12 de julio reseña las vistas tomadas en Madrid, Barcelona y Zaragoza y se hace eco del álbum de España Monumental. El mismo periódico publica un extenso artículo sobre métodos y técnicas fotográficas.

Concluye el reportaje de las obras del Canal de Isabel II del que hoy se cuentan hasta 43 fotografías.

1857. Participa en la Exposición General de Agricultura celebrada en Madrid con 24 vistas de las obras del Canal de Isabel II, logrando una mención honorífica. Igualmente, sus fotografías se exponen en los salones de la Société Française de París.

Realiza una serie de vistas de la madrileña Puerta del Sol con una considerable atención a sus reformas.

1858. Traslada su residencia y laboratorio a la Carrera de San Jerónimo, nº 16 de Madrid.

Con una selección de 28 fotografías positivadas en papel albúmina a partir de negativos de colodión confecciona el álbum cuyas imágenes había tomado años atrás titulado Vistas de la presa y demás obras del Canal de Isabel II fotografiadas por Ms Clifford.

En primavera viaja a Toledo y Extremadura, donde fotografía Yuste, Mérida, Alcántara y otros puntos, en una excursión de interés documental y personal. Por encargo de la infanta Luisa Fernanda, duquesa de Montpensier,  fotografía el monasterio de Yuste y las propiedades de duque de Frías y el marqués de Mirabel. Como resultado final realizó un álbum de 28 fotografías que se conserva en el Palacio Real. Igualmente, de Toledo confeccionará un álbum de nueve vistas para el duque de Medinaceli. De este viaje, el periódico La Iberia y El Mundo Pintoresco reseñan “la presentación a la reina del Álbum de su viaje por Toledo, Cáceres y Badajoz”, así como la publicación que realiza en Londres de una colección de vistas de los monumentos de España.

Fruto de la expedición con la familia real iniciada en julio es una carpeta de diez fotografías cuyas reseñas se publicaron en El Museo Universal  ilustradas con grabados sobre fotografías de Clifford. Un ejemplar de esta carpeta que perteneció a Juan Francisco Sáez de la Filatelia Doblón de Segovia se incluye una fotografía más que reproduce el puente del ferrocarril de Arévalo, titulada.  

Recuerdos del viaje de SS. MM. y AA. RR. a Valladolid, y de la solemne inauguración del puente Príncipe Alfonso en presencia de SS. MM. Y AA. RR. el día 25 de julio de 1858, que presenta respetuosamente a SS. MM. La Sociedad General de Crédito Moviliario Español en conmemoración de aquel fausto día.

A partir de este año empieza a colaborar en el periódico El Museo Universal, donde se reproducen en xilografías sus fotografías del Canal de Isabel II y del viaje real a Valladolid. Otros cinco grabados de las fotos del Canal se publican en El Mundo Pintoresco.

La “Era”, de Goya. Foto de Clifford, año 1856. BNE.

1859. Presenta sus obras en el salón de la Societé Française de la Photographie de París.

En Madrid fotografía el Puente de los Franceses en obras y diversas vistas, también realiza un amplio reportaje del puente de Alcántara (Cáceres) sobre el río Tajo con motivo de su reciente reconstrucción.

Continúa su colaboración con en el periódico inglés Ilustrated London News con fotografías reproducidas en grabados, como en los números del 3 de diciembre del puerto de Algeciras.

Viaja por el sur para tomar vistas de Bailén, Málaga, Alhama, Cádiz, Gibraltar, Tarifa, Sevilla, Jerez, Córdoba y Tánger, según anuncia El Clamor Público.

La reproducción que hizo del cuadro La coronación de Quintana  se exhibe en el escaparate de la “Corona de Oro” sito en la Carrera de San Jerónimo.

1860. Traslada su residencia en la calle de Isabel la Católica, nº 12., en el barrio de Leganitos.

Confecciona un portafolio de 11 fotografías sobre papel albúmina obtenidas de negativo de colodión con el título Álbum de vistas fotográficas del Puente de Alcántara.

Sus fotografías de Toledo y Zaragoza se reproducen mediante grabados en El Museo Universal.

Las fotografías realizadas en su recorrido por el noroeste peninsular sirven para ilustrar la  crónica  escrita por Juan de Dios de la Rada y Delgado ilustrado con litografías de  Joaquín G. del V., J. Villegas, Tomé y C. Múgica sobre sus fotografías y donde se reproducen en litografías cuatro vistas de Valladolid, dos de León y dos de Oviedo, con el título Viaje de SS. MM. y AA. RR. por Castilla, León, Asturias y Galicia, verificado en el verano de 1858.

Fotografía una selección de las obras premiadas en la Exposición Nacional de Bellas Artes de los pintores Luis López Piquer, Esquivel, Parcerisa, Víctor Manzano, Carlos Haes, Manuel Castellanos, Suárez Llanos y Dionisio Fierros. También reproduce una pintura de Ramón Soldevilla del general O´Donell expuesta en el Teatro Real.

Se publica en Londres el libro de viajes  An Autumn Tour in Sapin in the Year 1859 de Richard Roberts con seis litografías realizadas a partir de fotografías de Clifford.

En otoño acompaña a la comitiva regia en uno de sus viajes que dará título al álbum de 56 fotografías  titulado Recuerdos fotográficos del viaje de SS. MM. y AA. RR a las Islas Baleares, Cataluña y Aragón.

“La Coronación de Quintana”, pintura de López Piquer. Foto Clifford, 1859 (BNE).

1861.  El 28 de julio El Museo Universal publica que Clifford acaba de regresar de Londres trayendo consigo “la mayor máquina fotográfica construida hasta el día, con la cual se pueden sacar vistas hasta de metro y medio en cuadro”. Así mismo, reseña que se encuentra en Alemania en busca de material fotográfico moderno. A su regreso, según el mismo periódico,  ha recibido el encargo de la Reina de Inglaterra de un álbum, de unas seiscientas láminas, que represente los principales monumentos de España. Por otra parte, la Reina de España le encarga dos retratos, uno en traje de Condesa de Barcelona y otro en el de Reina.

Se publica  la crónica de  Antonio Flores con ilustraciones dibujadas y litografiadas por V. Urbabieta y C. Múgica sobre fotografías de Clifford, quien presenta un hermoso álbum dedicado a la reina,  del cual realiza 12 ejemplares con 60 láminas, según reseñan El Clamor Público  y El Contemporáneo, titulado La Crónica de viaje de Sus Majestades y Altezas Reales a las Islas Baleares, Cataluña y Aragón en 1860

1862. Actúa como proveedor del material fotográfico que adquiere en Londres y como instructor de Rafael Castro Ordóñez para fotografiar la expedición al Nuevo Mundo de la Comisión Científica del Pacífico.

Realiza un lujoso álbum de 93 imágenes del que se editarán después treinta ejemplares a cargo de su viuda titulado.

Recuerdos fotográficos de la visita de SS. MM. y AA. RR a las provincias de Andalucía y Murcia en setiembre y octubre de 1862.

Publica el catálogo de su obra sobre los monumentos de España con reseña de 171 imágenes titulado A Photographic Scramble trough Spain  (“Peripecias fotográficas por España”).

La obra fue atrocinada por sus majestades la Reina de Inglaterra, la Reina y el Rey de España, el Emperador y la Emperatriz de los Franceses, el Emperador de Rusia, y el Duque de Montpensier. Un ejemplar del catálogo se conserva en la Biblioteca Nacional (sig. 2-79972) y otro en la Biblioteca del Palacio Real (sig. 1044696), reseñándose en él cuatro vistas de Ávila y una de Arévalo.

El Museo Universal publica un grabado de la fotografía  de La Puerta de Ávila de Medina del Campo (Valladollid).

1863. Fallece el 1 de enero, siendo enterrado en el cementerio británico de Madrid. Su esposa Jane Clifford se hace cargo del estudio fotográfico donde permanecen los mismos operarios que trabajaban en el establecimiento desde hace diez años, además de su hijo que también hacía de representante.

Se publica la crónica  escrita por Fernando Cos Gayón con grabados sobre fotografías de Clifford titulada.

Crónica del viaje de Sus Majestades y Altezas Reales a Andalucía y Murcia en septiembre de 1862.

El museo South Kensington de Londres (actualmente Victoria and Albert Museum) adquiere una “Colección de vistas fotográficas de España de Clifford”, entre las 144 imágenes se encuentran cuatro vistas de Ávila y una de Arévalo.

Jane realiza un reportaje de unas 66 fotografías del Tesoro del Delfín (conservado en el Museo Real de Madrid procedente de la herencia de Felipe V) para el museo  South Kensington de Londres. También concluye la confección de treinta ejemplares del ábum titulado Álbum de Andalucía.

Se publica el primer volumen del álbum editado en Madrid por Francisco Muñoz y Ruiz y José Sala y Sardá. La obra completa consta de cinco tomos y reproduce una total 195 fotografías de Clifford, donde se incluyen una vista de la catedral de Ávila y otra del puente de Arévalo titulado Álbum Monumental de España: Colección fotográfica de sus mejores obras arquitectónicas.

Expone una selección de vistas en la “Societé Française de la Photografhie” de París.

“Los Reyes Católicos impartiendo justica”, pintura de Víctor Manzano. Foto Clifford, 1860 (BNE).

1864. Jane Clifford, su viuda, traslada, el establecimiento fotográfico a la calle Mayor, nº 18-20, donde vende y distribuye el fondo fotográfico de su marido, y “también se encarga de copiar cuadros, grabados, planos, etc.” según se anuncia en El Contemporáneo, periódico que dirige Gustavo Adolfo Bécquer, autor de la reseña publicada en el mismo sobre la inauguración del ferrocarril del norte con parada en Ávila.

1865. Jane Clifford sigue anunciándose en El Contemporáneo. El periódico ese año se hizo eco de la visita realizada a Ávila por Lady Franklin, esposa del  marino y explorador inglés del Polo Ártico, así como de la parada y estancia en la ciudad del  séquito real de Isabel II.

La Correspondencia de España reseña el éxito del estudio fotográfico de Jane Clifford.

Se editan los tomos 2, 3 y 4 del Álbum Monumental de España, con lo que ya suman 189 las vistas de Clifford publicadas.

1866. Jane Clifford realiza la colección de un centenar de imágenes de la Armería Real con destino al museo  South Kensington de Londres, sin poder concluir si todas ellas fueron realizadas por ella misma o si utilizó negativos de  su marido.

1867. Se publica la Guía oficial de los  caminos de hierro de España y Portugal donde se inserta a media página el siguiente anuncio en español, inglés y francés:

Clifford. Fotógrafo de S.M. la reina de España y de S.M. la reina de Inglaterra. Calle Mayor, números 18 y 20. Madrid. Vistas de España. Cuadros del Real Museo de Madrid. Fotografías de objetos que existen en la Real Armería de Madrid. Retratos, etc.,  etc.

En la misma publicación también se incluye anuncio publicitario del gabinete de fotografía artística del Conde de Vernay, fotógrafo de SS MM, sito en la calle Montera, núm. 44, Madrid.

1868. La Revista de Bellas Artes reseña que acaba de terminarse la publicación del Álbum Monumental de España que consta de cuatro tomos con 59 entregas y otras tantas láminas cada uno, incluyendo ocho vistas de monumentos de Ávila. La edición concluye con un quinto tomo como Apéndice con seis fotos más de Clifford y el resto de Laurent.

1869. Las fotografías de Clifford  fueron utilizadas por  Valeriano Foulquier en la ilustración de libros y guías. Buen ejemplo de ello es la fotografía de la plaza del Mercado Grande de Ávila  reproducida en los libros de Eugène Poitou  Souvenirs d´Espagne  y Voyage en Espagne publicados en 1880. En ellos observamos también  ilustraciones con la misma técnica de Burgos, Segovia, Yuste, El Escorial, Toledo, La Alambra, Gibraltar y Sevilla.

BIBLIOGRAFÍA BÁSICA

BENET Juan; LÓPEZ MONDÉJAR, Publio. Vistas de las obras del Canal de Isabel II [Fotografías de Charles Clifford]. Madrid: Canal de Isabel II, 1988.

CLIFFORD, Charles. A photographic scramble through Spain. London: A. Marion, 1866 (BNE).  

FONTANELLA, Lee, et al., Charles Clifford: fotógrafo de la España de Isabel II,  Madrid: Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales / El Viso, 1996.

FONTANELLA, Lee. Clifford en España: Un fotógrafo en la corte de Isabel II. Madrid: El Viso, 1999.

PIÑAR SAMOS, J. y SÁNCHEZ GÓMEZ, C.: "Clifford y los  álbumes de la Academia", en Academia, Boletín de la Real Academia  de Bellas Artes de San Fernando, nºs. 98-99.Madrid, RABASF, 2004.

SANCHIDRIÁN GALLEGO, Jesús Mª. La muralla de Ávila. Fotografía histórica y monumental. Ávila: Piedra Caballera, 2007.

VV.AA. Clifford en España: 1849-1863: colección Martín Carrasco [catálogo exposición]. Oviedo: Museo de Bellas Artes de Asturias, 2000.

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18-11-18 - El sorteo de la Lotería Nacional deja parte del primer premio en Medina del Campo (Valladolid)

EUROPA PRESS

El sorteo de la Lotería Nacional de este sábado ha dejado parte del primer premio, que ha correspondido al 12.531 y está dotado con 600.000 euros al número, en Medina del Campo (Valladolid), según informa Loterías y Apuestas del Estado a Europa Press.

En concreto, se ha despachado en el despacho situado en el número 43 de la calle Valladolid. Además de en la localidad de Medina del Campo, el primer premio también se ha repartido en Bilbao, Gama (Cantabria), Las Palmas, Murcia y Zaragoza.

El segundo premio, dotado con 12.000 euros al número, ha correspondido al número 58.946 que se ha vendido en Palma de Mallorca, Arganda del Rey (Madrid), Madrid, San Pedro Alcántara (Málaga) y Albarracín (Teruel). El reintegro ha correspondido a los números 0, 1 y 5.

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