La cubierta del edificio antiguo estaba derrumbada sobre los restos conservados, y se retiraron los escombros hasta alcanzar la cota de suelo original.
Al tiempo que se desarrollaban los trabajos de desescombro,un arqueólogo, autorizado por la Junta de Castilla y León, fue supervisando las labores para registrar la aparición de elementos históricos ocultos.
¿Que hemos hecho en este edificio?
La primera actuación ha consistido en la comprobación y estabilización de los restos murarios conservados. Eliminación de construcciones adosadas al núcleo original. Se evaluó continuamente la estabilidad de los muros por medio de testigos de yeso.
Retirada de escombros en el interior del edificio. La zona más delicada fue la arquería del claustro. Se trata del elemento más característico del edificio y quizás el más atractivo. Para su recuperación, la primera labor consistió en excavarlos y retirar toda la vegetación que estaba descomponiéndolo.
Recomposición de los pilares de la arquería. Los arcos se recompusieron y al igual que todos los lienzos de ladrillo visto, se picaron, limpiaron y rejuntaron.
Se pudo recuperar el escudo de Medina en la fachada y descubrir la hornacina que adorna la entrada del edificio.
Las basas de granito se conservan, se limpiaron y recolocaron.
Se procedió a estabilizar los cajones de tierra y restaurar las fábricas de ladrillo, limpiándose ladrillo a ladrillo, para recuperar la belleza perdida.
Al tiempo que se iban restaurando los muros, se iban ejecutando los forjados, que constituyen la estructura horizontal dl edificio.
Al igual que la estructura de la cubierta, se utilizó madera laminada, aunando tradición y modernidad.
A menudo que los muros volvían a recuperar su fuerza inicial, se procedió a la construcción de la estructura de madera que cubre todo el edificio.
El lucernacio que cubre, y al mismo tiempo ilumina el interior del claustro, se montó en el aparcamiento anexo y una vez construido, se colocó en la posición definitiva.
Antes de su izado, se dibujaron sobre el muro, los puntos exactos donde el lucernacio se debía colocar, y por medio de una grúa de 150 toneladas se elevaron los 8000 kg de lucernario.
Paralelamente, junto a este edificio, se ha ido construyendo otra edificación, enteramente nueva que sirve de complemento al antiguo convento de San José.
El Ayuntamiento e Medina del Campo pretende que el CENTRO CULTURAL INTEGRADO "ISABEL LA CATÓLICA" sea punto de encuentro y referencia de la vida social y cultural de la Villa.
Este Centro se concibe como un aglutinante de lo colectivo, dispensador de Servicios y alternativas de la comunidad de este municipio. En el ámbito de convivencia, referencia cultural, dentro de actividades, una auténtica "plaza del pueblo" donde confluyen las más diversas energías y peculiaridades y donde se habla, se escucha, se lee, se enseña, se aprende, se juega, se ríe, se observa, se baila, de descansa, se practica, SE VIVE.
En este edificio se pone a prueba la auténtica igualdad de oportunidades, donde los ciudadanos conviven a través del diálogo y las prácticas asociativas culturales.
El CENTRO CULTURAL INTEGRADO, ha sido creado para ser usado, para ser útil; una premisa que esperamos que sea asumida por los Medinenses.