En
el primer capítulo dedicado a los edificios monumentales de carácter
civil, se recogen fotografías del actual Consistorio
de la Plaza
Mayor, la Casa
de los Arcos, las Reales
Carnicerías "de San Francisco" y cuatro
casonas palaciegas, a saber: el palacio
del Marqués de Tejada o del Almirante y las casonas de los
Montalvo, Belloso y Falces.
Respecto
al Ayuntamiento,
recordamos que es el sucesor de las casas consistoriales situadas frente
a la iglesia
de San Miguel, junto al río. Su construcción se llevó
a cabo entre 1656 y 1667, dirigiendo las obras Francio Cillero. Junto
al nuevo edificio municipal, sobre la propia bocacalle de Salamanca,
el Cabildo
de la Colegiata
levantado en 1670 el edificio conocido como "Casa
de los Arcos", en cuyo cuerpo superior situó su
blasón entre dos sirenas; en él se abrió el balcón
corrido para que los beneficiados eclesiásticos pudieran presenciar
los actos y festejos celebrados en la plaza. En el otro flanco, en la
casa que vemos a la izquierda del Consistorio,
estaba instalada, en los tiempos en los que se tomaron estas instantáneas,
la oficina de telégrafos, cuyas primeras dependencias se establecieron
en la estación del ferrocarril en 1866.
Las
Reales
Carnicerías constituyen un singular edificio, numerosas veces
elegido como uno de los pocos ejemplos de su tipología que han
llegado hasta nosotros. Aunque en su traza definitiva sabemos de la
intervención indirecta de Rodrigo Gil de Hontañón,
la construcción efectiva de su fábrica corrió a
cargo de los maestros carpinteros Juan del Pozo y Agustín Gallego.
Las obras concluyeron en 1562 y en época reciente sirvió
de almacén "de lujo" para trastos viejos; una
vez desestimado su derribo -circunstancia que llegó a plantearse
"por ornato público"- , fue destinado, en consonancia
con su origen, a plaza de abastos en 1935.
Junto
a estos edificios monumentales, hemos reunido en este capítulo
otras fotografías en las que se muestran las portadas barrocas
del Palacio
del Almirante, construidas en 1753 -en enero de 1965,m fueron objeto
de una encendida polémica a causa de su pretendido derribo-;
la fachada de la casona de los condes
de Adanero, tras la que se adivina, al fondo, la desaparecida entrada
al teatro Isabel la Católica; la portada de la casona de los
Belloso, junto a las antiguas casas asoportaladas de la antigua "Carpintería",
y el interior del patio porticado del palacio
de los marqueses de Falces, donde residieron los famosos e influyentes
Peralta, luego aprovechado para colegio de las Hijas de Jesús
(desde 1896) gracias a la donación que hizo Isidro Sanz
Méndez dos años antes y hoy felizmente recuperado como
Casa de Cultural
Reportaje
fotográfico