La
localización del templo
de San Miguel, al paso de la antigua carretera de Madrid a la Coruña,
es una poderosa zarón para entender el gran número de
fotografías históricas que se conservan de esta iglesia
parroquial. En ellas podemos comprobar cómo su imagen exterior
poco ha variado desde que en 1799 se acabara de levantar el muro que
cierra los pies del templo, hacia el río. Frente a San Miguel
se encontraba el antiguo
Consistorio, edificado en la últim década del siglo
XV y ante él una olma centenaria, símbolo de la jurisdicción
municipal, todavía existente en el momento de realizar ambas
fotografías. También en ete paraje había una fuente
con caño denominado "de la cárcel", obra
del italiano portegiani, desaparecido a mediados del siglo pasado. Respecto
al puente
de las Cadenas, fue llamado tradicionalmente así por presentar
sobre sus pretiles, hasta 1827, las cadenas ganadas por medinenses a
los musulmanes en la batalla de las Navas de Tolosa.
Dos
fotografías del interior de esta iglesia dedicada al Arcángel
nos muestran, de una parte, su capilla mayor cubierta con crucería
y trompas esquinadas, y al fondo el gran retablo realizado por Leonardo
de Carrión a partir de 1567 presidiendo el conjunto; de otra,
el sepulcro de Don Juan de Aguilar, muerto en 1547, ornamentado con
bellas labores renacientes de grutescos, láureas y medallones
que, como podemos comprobar, ya no se encontraba protegido por la reja
ralizada en 1548 por Juan del Barco.
Las
siguientes imágenes corresponden a varios conventos establecidos
en la villa. De la veintena que llegaron a abrirse a lo largo de la
historia, actualmente aún quedan cinco conventos de vida consagrada,
cuatro de ellos femeninos --franciscanas clarisas, dominicas, agustinas
y carmelitas-- y uno masculino de carmelitas descalzos. Un detalle
de la fotografía de Jean Laurent obtenida desde la torre de Santiago
en 1877, nos muestra la calle de Santa Teresa con el aspecto exterior
de las casas
de las madres carmelitas de San José (a la izquierda)
y de las agustinas
ermitañas de Santa María Magdalena (a la derecha);
en ambos casos destacan as fábricas de us iglesias conventuales.
De sus respectivos interiores hemos localizado una imagen del retablo
mayor del tempo carmelita, con la escultura de Santa Teresa en primer
plano, y otra del extraordinario conjunto del Calvario, obra de Esteban
Jordán, situado en el lado del Evangelio del crucero del templo
agustino.
Las
tres fotografías restantes nos muestran elementos arquitectónicos
del monasterio
de Santa Clara; en ellas se aprecian: la fachada de la iglesia desde
el portón de la entrada al compás, la desaparecida torreta
que allí se levanta, y junto a ella, un recoleto soportal de
pies derechos y, por último, el interior de la iglesia presidida
por el retablo mayor, documentado en 1585 y reformado doscientos aos
después, que no ha llegado a nuestros días.
Reportaje
fotográfico