RESTAURACIÓN:
Luis Salazar
Rabasa
FINANCIACIÓN:
Ayuntamiento
de Medina del Campo. Proyecto Museo de las Ferias
DESCRIPCIÓN:
La Escultura
está tallada en piedra arenisca, con accesorios de hierro, y
representala escena de San Martín de Tours repartiendo su capa
con un pobre. Originalmente, este grupo estuvo situado en la hornacina
de la fachada principal de la iglesia de San Martín. La labra
se efectúa tanto por golpeado como por raspado o lijado, para
el acabado fino, debido a la blandura del material, mayor aún
estando mojado. Con posterioridad a la talla de la escultura, su superficie
o parte de ella se cubrió con un acabado de pintura a la cal
de un tono similar al de la piedra, con objeto de homogeneizar el aspecto
de la obra, aunque no se puede saber si se aplicó como acabado
final por el propio escultor, para igualar irregularidades naturales
de la piedra, o fue una restauración posterior que intentaba
ocultar manchas debidas a hongos o líquenes.
ESTADO
DE CONSERVACIÓN:
El principal
deterioro que sufrió la escultura fue su reciente rotura en más
de veinticinco fragmentos, como resultado de una agresión.
La
piedra se encontraba deteriorada por la exposición a la intemperie
en la hornacina, que afectó principalmente a la zona inferior.
La absorción de agua en la porosa piedra arenisca ha provocado
en las piezas diversos fenómenos como: la acción de sales
disueltas en el agua, la congelación del agua en su interior,
las variaciones de volumen del aglomerante de la arenisca, por la alternancia
de humedad y sequedad, y el crecimiento de líquenes en la superficie.
Todo ello ha producido agrietamientos, falta de cohesión y fragmentación
de la piedra, además de manchas y erosión.
En
anteriores reparaciones se unieron algunas partes rotas con espigas
de madera y cola de carpintero, y se reconstruyó el ala del sombrero
con cemento. También se perdió el bocado del caballo y
la espada del Santo, aunque ésta última apareció
durante la restauración.
PROCESO
DE RESTAURACIÓN:
La restauración
pretendió devolver a la pieza al estado anterior a la rotura,
además de limpiar y tratar la piedra para su futura conservación.
El tratamiento seguido fue el siguiente:
Limpieza
superficial.
Desalación
de los fragmentos con agua desionizada.
Limpieza
mecánica a bisturí de cementos, pintura y demás
incrustaciones.
Eliminación
de reintegraciones de cemento.
Limpieza
acuosa de las superficies con brocha de cerdas y jabón neutro,
y aclarado posterior.
Eliminación
de manchas con una solución de bicarbonato amónico.
Eliminación
de manchas grasas con disolventes orgánicos.
Consolidación
de toda la piedra por impregnación con ésteres de silicio.
Consolidación
de las plataformas por impregnación de una resina sintética.
Taladrado
e introducción de varillas roscadas de acero inoxidable fijadas
con resina sintética en las roturas más delicadas.
Pegado
del resto de los fragmentos con resina sintética.
Taladrado
de las plataformas por su parte inferior y fijación con resina
de dos tacos roscados para permitir su sujeción a la peana de
exposición.
Reintegración
del volumen perdido con un mortero de arena y resina sintética,
de aspecto similar a la arenisca.
Limpieza
mecánica de la espada de hierro.
Tratamiento
anticorrosivo de la espada y aplicación de una capa protectora.
Fijación
de la espada con resina sintética.