24-08-03
- La huella de los dinosaurios
El colectivo arqueológico de Salas en Burgos hallan la
huella más grande de dinosaurio encontrada en España
Texto
de/Rosalía Santaolalla. Fotografía de Félix
Ordóñez.
UNA
huella de 74 centímetros da una pista sobre el enorme tamaño
del animal que
dejó su marca en el paraje de Costalomo. 140 millones de
años después, en la localidad de Salas de los Infantes,
un grupo de científicos bautizó al dinosaurio como
'Atila', por el «pavor» que pudo causar
entre el resto de animales.
«Era
temible, cualquier otro dinosaurio se echaría a temblar»,
asegura Fidel Torcida, el director del Museo Arqueológico
de Salas, quien calcula que las patas de este terópodo
pudieron medir tres metros, lo que daría unos diez metros
de longitud y dos toneladas de peso.
Torcida
cree que puede ser la huella más grande de un dinosaurio
encontrada en España.
La
marca de 'Atila' no es la única que ha dejado al
aire la limpieza de Costalomo. Unas 120 huellas, algunas «realmente
interesantes», se muestran ahora en este yacimiento
de la Sierra de la Demanda.
«Tienen
la curiosidad de que son huellas en relieve, no son huecas»,
explica el director del Museo de Salas, que participa en la campaña
de excavaciones. Se trata de marcas que sobresalen de la roca,
en un proceso de conservación que los miembros del equipo
investigador cree «único en el mundo»,
y que está en plena fase de estudio. Desde luego, no se
trata de la huella original, sino del antiguo relleno, según
apunta Fidel Torcida.
Protección
Los
de Costalomo y La Pedraja, éste último cerca de
Mambrillas de Lara, son los dos yacimientos en los que han aparecido
las icnitas más interesantes. En el caso de La Pedraja,
la protección se hace necesaria por la fragilidad de las
rocas donde han aparecido las huellas.
Para
Costalomo, el Colectivo Arqueológico de Salas propondrá
la delimitación de unos 600 metros cuadrados y la construcción
de un edificio en el que se controlarían las visitas al
yacimiento.
Los
numerosos restos de icnitas no son el mayor atractivo relacionado
con dinosaurios de la Sierra de la Demanda. Esta zona es rica,
sobre todo, en restos óseos de estas antiguas especies.
Y
existe un yacimiento, el de La Revilla-Ahedo, especialmente interesante
por sus hallazgos.
Allí
han aparecido partes del esqueleto de un dinosaurio, un rebaquisáurido,
del que no se habían encontrado restos en Europa, sólo
en África y Sudamérica. En la campaña de
excavaciones del año pasado vieron la luz los primeros
restos de esta especie única, una circunstancia que ha
suscitado la curiosidad de la comunidad científica, incluso
fuera de España.
Más
ejemplares
Este
año, las expectativas del equipo investigador se han visto
recompensadas con más restos que, por su tamaño
y forma, confirman que en el yacimiento existen más ejemplares,
entre ellos un espinosáurido y un ornitópodo, un
pequeño dinosaurio herbívoro.
La
campaña de este año en La Revilla-Ahedo está
a punto de culminar. En ella han trabajado unas 35 personas, entre
ellas los miembros del Colectivo Arqueológico de Salas
y 28 estudiantes de universidades de Salamanca,
el País Vasco, Zaragoza y León,
además de paleontólogos visitantes. Un grupo diferente
al de aficionados que comenzaron con las primeras excavaciones.