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Isabel la Católica
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LA RUTA DEL QUETZAL - ITINERARIO

Itinerario Ruta Queztal 2004 por España
Del 11 al 30 de julio

Domingo 11 Julio (Madrid)
2:00 Llegada del vuelo procedente de México

Traslado al campamento en Boadilla del Monte

14:00 Almuerzo en el campamento
16:00 Recorrido histórico por la ciudad

Aunque ha estado habitada desde la prehistoria, Madrid no era más que una pequeña aldea cuando los árabes invadieron la península. Ellos la fortificaron en el siglo VIII y la llamaron Magerit.

En 1083, Alfonso VI la toma a los árabes y, cuenta la tradición, al entrar en la ciudad, descubrió una imagen de la virgen junto a un almudín, depósito de trigo, por lo que, convertida la mezquita en iglesia, la dedicó así a la Virgen de la Almudena, que se convirtió en la patrona de la villa.

A partir del s. XIV las estancias de los reyes de Castilla en Madrid se hacen más frecuentes incluso los Reyes Católicos hacen su entrada solemne en la villa en 1477.

Prueba de su interés fue la orden de construcción del Monasterio de San Jerónimo el Real.

Carlos V, reconstruyó el Alcázar árabe para los Austrias, que acabaría destruido por un incendio en 1734 y Felipe II nombró a Madrid capital de su reino en 1561, aunque no lo sería definitivamente hasta 1607.

20:00 Cena en el campamento

Lunes 12 Julio (Madrid – Medina del Campo)

08:00 Desayuno.

10:00 Salida hacia el Palacio Real

12:00 Audiencia de sus Majestades los Reyes de España

14:00 Almuerzo de campaña

16:00 Salida hacia Medina del Campo

Medina del Campo se sitúa en el centro de una amplia llanura situada al sur del Duero, en la zona central de Castilla y León. La uniformidad topográfica es una de las características más acentuadas de este espacio, que se va modificando según avanza hacia el este, donde las cuestas de los páramos destacan en un paisaje en el que se singularizan los cauces, frecuentemente encajados, de los ríos principales, Adaja y Eresma, siendo el Zapardiel y el Trabancos mucho menos significativos.

De pasado romano y árabe, la ciudad tomó vigor en el tramo final de la Edad Media, cuando su Feria se posicionó a la cabeza de las actividades económicas de la Península Ibérica. El punto central de la ciudad es la Plaza Mayor, rectangular y amplia, donde se siguen celebrando las ferias que dieron fama europea a Medina desde el siglo XIV. Los viejos nombres de las aceras (Armería, Joyería, Especiería, Mercería, etc) recuerdan la actividad comercial. En uno de sus ángulos se encuentra el Palacio Real, donde murió Isabel la Católica. A su lado están el ayuntamiento, y la iglesia de San Antolín. Conocer más...

20:00 Llegada y conferencia en la plaza Mayor.

La plaza más grande de España – catorce mil metros cuadrados – sintetiza la mayor parte de la Historia de Medina del Campo y su tierra. En torno a la primera mitad del siglo XIII ya se tenía conocimiento de su existencia y por su importancia. Centro mercantil y económico de Castilla, fue la espina dorsal de la Villa de Medina del Campo, creadora de gran riqueza junto con la economía lanar, ganadera y agraria, de los siglos anteriores, alcanzando también una fama nacional e internacional los vinos de Medina, dándose a conocer estos "caldos" a los ricos mercaderes en las ferias.

Audiencia con el Presidente de Castilla y León, Don Juan Vicente Herrera.

21:00 Cena.

22:00 Concierto en la Catedral de Santo Tomás, a cargo del grupo vocal “In Sexta Hora”.

Acampada en el Castillo de la Mota. Conferencia sobre Isabel la Católica a cargo de Fray Tarsicio Azcona.

De origen remoto, Alfonso VIII procedió a su reconstrucción y los Reyes Católicos a su renovación, siendo blasonado por éstos. Las sucesivas reconstrucciones han formado un conjunto organizado en torno a cuatro recintos: una barbacana externa, que contiene la plaza de armas; un muro de almenados cubos y arpilleras; el castillo; y la elevadísima torre del homenaje.

La construcción está realizada en hormigón apisonado con revestimiento de ladrillo.

Corredores subterráneos recorren la fortaleza. El castillo propiamente dicho está compuesto de un recinto exterior cuadrangular que se flanquea en tres de sus partes por macizas torres cuadradas.

El cuarto lado fue construido en tiempos de Juan II, el promotor también de la construcción del foso, el fortificado puente y la barbacana. En este lugar se produjeron importantes hechos de la historia de España. Se discutió la privanza de don Beltrán de la Cueva y fue sitiado durante diez meses por los enemigos de Enrique IV.

Fue posteriormente ofrecido en tributo a los Reyes Católicos, convirtiendo el castillo en prisión, por donde pasaron ilustres personajes como Hernando Pizarro, don Rodrigo Calderón, el duque Fernando de Calabria, César Borgia o el conde Aranda, sin olvidar la estancia de doña Juana la Loca antes de ser convertida la fortaleza en prisión. Quizá el hecho más destacado sea la huída de César Borgia, gracias a la lima y la cuerda proporcionadas por el conde de Benavente. A pesar de quel guardián se dio cuenta de la huída y cortó la cuerda, el preso consiguió escapar con heridas leves.
Martes 13 Julio (Medina del Campo - Arévalo –
Ávila)

Eran sobre las doce del mediodía cuando expiró la Reina "fundadora de España y madre de América". Preces entre llantos y la celebración de la primera "Misa corpore insepulto" en el oratorio de la casa-palacio que los reyes de Castilla poseían en la ferial y amplia Plaza Mayor de la Villa medinense, sobre su "acera del portillo o potrillo", presidida por el atributo del rey don Fernando, seguida por los preparativos cortesanos para el traslado del regio cadáver hasta la lejana Granada, según había dispuesto en su Testamento, modelo de prudencia cristiana devoción santa.

Largo y accidentado entierro desde esta Medina del Campo, su Villa "Muy Noble, Leal y Coronada", hasta la Granada que por ella conquistada y cristianizada doce años atrás.

Salieron, pues, los restos mortales de la Reina Católica revestidos con el burdo y penitencial hábito franciscano austero, pero fuerte ataúd, por el cual "con una cama para asentar las andas, cobró novecientos setenta maravedíes el maestro de obras de carpintería de Palacio". El ataúd y sus andas portado inicialmente por sus fieles criados y camareros y rodeado por un gran número de "damas y caballeros junto a sus más fieles servidores y miembros de la Corte", que le escoltarían hasta la ciudad de Granada, "sin detenimiento alguno" como la Soberana dispuso en su última y real voluntad.

08:00 Desayuno

09:00 Salida hacia Arévalo

10:00 Llegada y recorrido por la ciudad

En el año 1090 encontramos el primer testimonio escrito del nombre de esta ciudad antigua y noble situada en plena meseta castellana, que se transformaría en Arevalorum.

Con la llegada de los pueblos árabes en el año 711, esta zona fue habitada por tribus norte-africanas de pastores beréberes. Con el avance de la reconquista, los reinos cristianos fijan las fronteras en el Duero y Arévalo quedó situada en la denominada Extremadura Castellana, la franja de territorio comprendida entre el Duero y el Sistema Central, escenario de continuas incursiones o razzias, permaneciendo escasamente poblada. Arévalo es también conocida como la ciudad de los cinco linajes, por ser este el número de familias que se encargaron de organizar la repoblación y gobernar "su tierra": Briceños, Montalvos, Sedeños, Tapias y Verdugos.

Alfonso X el Sabio en 1256, confirma el 20 de junio a los caballeros de Arévalo el "Fuero de los Excudos" y Sancho IV en 1287 otorga en una Cédula Real el "Fuero de las Leyes" y otras concesiones, formando un cuerpo de privilegios que se llegaron a conocer durante mucho tiempo como "Fuero de Arévalo". En 1261 el mismo rey prohíbe el ir armados a arevalenses y abulenses a la feria de Alba de Tormes, para evitar reyertas, confirmando así el intercambio comercial entre ambas ciudades. Los s. XII y XIII fueron de gran crecimiento y es el momento histórico donde surge la arquitectura mudéjar, sello arquitectónico tanto de la villa como de su tierra, formando ambas un
foco de arte mudéjar, quizás el conjunto mas importante de Castilla.

14:00 Almuerzo

15:30 Salida hacia Ávila por los pueblos de El Bohodón, Gotarrendura y Cardeñosa

16:30 Llegada a Cardeñosa y Misa conmemorativa en la parroquia de Santa Cruz

17:00 Marcha a pie desde Cardeñosa hasta Ávila

20:00 Visita a la Exposición “Las Edades del Hombre: Testigos” en la Catedral

"Testigos" es la continuación de la exposición de Segovia "El Árbol de la Vida". De hecho, es la misma vida de ese árbol, enviada por el Resucitado a través del Espíritu, con el fin de que sus seguidores salieran, y sigan saliendo hoy en día a la calle, y vayan al mundo y a los hombres para darles razón, mediante el testimonio y la predicación, de su esperanza.

Catedral de Ávila. La catedral abulense había nacido en la segunda mitad del siglo XII con vocación de templo fortaleza, entestando en la muralla su bella cabecera románica.

Ésta fue reforzada en el siglo XIV con un enorme cubo envolvente rematado en triple línea de almenas descomunales y hoy, la contemplamos convertida en el célebre Cimorro.


El maestro Fruchel parece ser el autor de la traza románica del edificio que, en su largo periodo de construcción, hubo de asumir las nuevas técnicas góticas hasta convertirse en el primer ejemplo hispano de este estilo.

Entrando por la puerta del Peso de la Harina se pueden descubrir algunos de sus más elementos exteriores como la Portada de los Apóstoles (S. XIII), de un gótico rígido y severo; su recia y prismática torre vigía, decorada con las bolas abulenses; el retablo pétreo de la fachada oeste, amalgama de manos y tiempos diversos, y las elegantes cresterías platerescas de Vasco de la Zarza que coronan la calle de la Cruz Vieja. Su interior de planta de cruz latina de tres naves, integra sus magníficos tesoros artísticos.

21:00 Cena.

22:00 Concierto en la iglesia San Tomás.

Acampada en el Palacio de los Reyes Catlólicos ‘Real Monasterio de Santo Tomás’

Miércoles 14 Julio (Ávila – Cebreros – Toledo)

Ya en las horas que precedieron a su cristiana y ejemplar muerte, la cerrazón de los cielos aberruntaba fuerte temporal, por lo que se hubo de forrar el ataúd con "cueros de becerro y una fuerte funda encerada".

Según los Cronistas, el aguacero y truenos iniciales se transformaron pronto en diluvio oscuro y tenebroso, y así "diluviando transpusieron los puertos, entre rayos y truenos, dejando atrás, rápidamente, Arévalo, Cardeñosa, Ávila, Cebreros y Toledo..." porque no solamente era el Reino todo el que únicamente lloraba, sino la Naturaleza también manifestaba su dolor y duelo. Ya al pasar por Cebreros, treinta braceros tuvieron que ayudar a vadear el crecido río, lo que hacía presagiar el paso del caudaloso Guadalquivir y parte de su cuenca fluvial alta.

08:00 Desayuno

Salida hacia el Cerro de Guisando

Inicio de la marcha a pie por la Cañada Real Leonesa hasta el Cerro de Guisando Visita al conjunto escultórico de los Toros de Guisando Fechados en el siglo III a.C., se cree que este grupo de grandes esculturas de piedra granítica en forma de toros – máximo exponente de la cultura celtibérica peninsular – podían tener funciones de limitación de territorios, culto a dioses o protección del ganado.

Según los historiadores en este lugar se celebró “El Pacto de los Toros de Guisando” en el año 1468, acuerdo al que llegaron Enrique IV y la princesa Isabel, y en el que se reconocía a Enrique como rey de Castilla y como sucesora a su hermana Isabel. los mayores y su significado constituye aún una incógnita.

13:00 Almuerzo de campaña

15:00 Continuación a Toledo

17:00 Llegada e instalación del campamento en la Academia Militar

19:00 Concierto en la iglesia de San Juan de los Reyes, a cargo del grupo vocal “In Hora Sexta”

20:30 Cena y tiempo libre por la ciudad

Jueves 15 Julio (Toledo – Los Yébenes – Viso del Marqués)

Según los historiadores que vivieron en aquellos últimos días de noviembre y primeros de diciembre del año de 1504 no conocieron temporal igual al que reinó en dichas fechas, y ya antes de llegar a Toledo tuvieron que cubrir y reforzar el féretro con "dos cueros de becerros, por lo que se pagaron al zapatero Diego de Madrid mil quinientos ochenta y cuatro maravedíes y medio".

Allí, en esta ciudad de Toledo hicieron una breve parada donde "había muchos lodos y los caballeros y regidores que tomaron en hombros el ataúd frente a la toledana Puerta del Cambrón, de donde salió el Cabildo para rezar un responso, y lo llevaron a San Juan de los Reyes", a pesar de que quisieron honrar los restos mortales de la Reina "Fundadora y Fundidora de España y Madre de América", en su bella y amplia iglesiacatedral Primada, pero el horrible temporal que desde la tarde del día 26 de noviembre de aquel triste año de 1504 reinaba en la mayor parte de la Península Ibérica "urgía ganar tiempo"`para que no se hicieran invadeables los ríos e intransitables los caminos.

08:00 Desayuno

09:00 Recorrido histórico por la ciudad

Historia y mitología se mezclan en el origen de esta ciudad universal, que combina sabiamente la luminosidad de su silueta sobre el Tajo y la oscuridad tortuosa de sus sinuosas callejas.

Tras la conquista de Iberia, la ciudad fue eternamente romanizada. Fortaleza, murallas y un grandioso puente sobre el Tajo (que luego los árabes llamaron Alcántara), junto con grandes obras públicas, como el alcantarillado y el circo, hicieron de Toletum una de las grandes urbes del imperio.

En el año 466, Eurico entra en Toledo, aunque la ciudad no será corte del reino visigodo hasta la coronación de Recaredo. Con éste se oficializa también el cristianismo como religión dominante. Si la comunidad judía era numerosa en Toledo desde antes incluso de la dominación romana, el cristianismo había ido creciendo en importancia, hasta el punto de que con Recaredo los obispos son consejeros reales y los Concilios funcionan a veces como Consejos de Estado. Esta situación se oficializa en el III Concilio de Toledo, que proclama el catolicismo religión oficial del reino.

Diecisiete monarcas gobernaron España desde Toledo a lo largo de un siglo y cuarto, del 587 al 711, año en que, víctima de enfrentamientos con la nobleza, termina dramáticamente la monarquía visigoda. Durante tres siglos, gracias a la tolerancia musulmana, convivieron en la ciudad árabes, bereberes, muladíes, judíos y mozárabes, que hicieron de Toledo una villa próspera y culta. La llamada Tolaitola, se convierte en el más importante centro musulmán al Norte de España. Los restos más remarcables de esta época son: La Mezquita del Cristo de la Luz, del s. X, aún intacta. Sobre cuatro columnas visigóticas reposan nueve cúpulas de las más diversas estructuras, todas ellas inspiradas en la Mezquita de Córdoba. La Vieja Puerta de la Bisagra, construida entre los siglos XII y XIII, es la única que queda de la antigua muralla árabe. Los cristianos que vivían en territorio musulmán (mozárabes) tuvieron sus iglesias abiertas, de esta época datan la iglesia de San Sebastián y la de Santa Eulalia, aunque fueron reconstruidas posteriormente, se pueden apreciar las huellas de esta época.


La entrada de Alfonso VI en Toledo, el 25 de mayo de 1085, marca el principio de una época de gran prosperidad, gracias a la generosa capitulación que otorga el rey cristiano.

Desde entonces Toledo crece en poder e influencia, hasta llegar a convertirse en la capital cultural de Occidente. En este hecho influyen el establecimiento de la sede primada de España, su situación de centro neurálgico del empeño bélico de la Reconquista, la creación por Alfonso X de la Escuela de Traductores de Toledo y el definitivo asentamiento del trono de España.

Con Carlos I y Felipe II, Toledo se convierte en la capital del imperio. Precisamente la grandeza del imperio marca el declive de su capital, pues Toledo se queda pequeña para las necesidades de la burocracia imperial. Así en mayo de 1561, Felipe II y su corte abandonan la ciudad del Tajo, para marchar a la nueva capital del reino. Se iniciaba el lento declinar de la vieja ciudad imperial, que durante años pareció vivir vuelta hacia su espléndido pasado.

13:00 Recepción del Presidente de la Comunidad de Castilla - La Mancha

14:00 Salida hacia Los Yébenes

15:00 Almuerzo en Los Yébenes

Existen pocos datos sobre la historia de esta localidad, cuya fundación parece que se remonta a los tiempos del emperador Trajano, en la época romana. Se sabe que existían dos pueblos independientes, Yébenes de Toledo y Yébenes de San Juan, tras cuya unión, en 1835, surgió el actual término de Los Yébenes.

Actividades en el molino de viento “El Cabrero”

Conferencia sobre “El Quijote”

19:00 Salida hacia Viso del Marqués

22:00 Llegada, instalación del campamento y cena

Viernes 16 Julio (Viso del Marqués – Sierra Morena)

Y así continuó el viaje-entierro de la Reina Doña Isabel la Católica. "Vadeando ríos y patiquebrando acémilas fueron alejándose de Medina y de Castilla, y así siguió el recio temporal durante los primeros días de aquel oscuro y tormentoso diciembre de 1504; y atravesando Jaén entró el doliente cortejo en Andalucía, que recibió el cadáver de Doña Isabel de Trastámara hecho un mar de lágrimas y dolor, y los cielos siguieron siendo negros y tenebrosos vestidos de luto.

08:00 Desayuno

09:00 Recorrido por la ciudad

La fundación de Viso del Marqués se origina durante la Reconquista, dada su ubicación en los caminos menos abruptos para cruzar Sierra Morena. Este hecho ocurre a mediados del siglo XII, llamándose la población en un principio Viso del Puerto Muladar (Muladar es una deformación de Muradal, lugar que comunica La Mancha con Andalucía). Su nombre actual de Viso del Marqués se debe al padrinazgo de los Bazán, desde que Don Álvaro, el Viejo, comprara al emperador Carlos V el término en el año 1538. Su hijo, Don Álvaro, el Mozo, primer Marqués de Santa Cruz, construyó su famosísimo palacio.

14:00 Almuerzo

17:00 Inicio de la marcha a pie, atravesando Sierra Morena

Se llama Sierra Morena al conjunto de relieves que jalonan el borde sur de la Meseta, y a cuyos pies discurre el Guadalquivir. Esta sierra – también denominada cordillera Mariánica – posee unos límites muy difíciles de determinar ya que en muchos puntos se une con la Oretana. Sierra Morena es una gran cuesta, anclada entre la llanura bética y la penillanura y que cubre todo el norte de la provincia de Jaén.

21:00 Cena de campaña y campamento en la Sierra

Sábado 17 Julio (Sierra Morena - Mengíbar – Granada)

Por las localidades de Mengíbar y Espeluy hubo de cruzarse en balsas el crecido e impetuoso río, y "más de un esforzado caballero tubo que forzar a nado las arremolinadas corrientes". Acémilas, provisiones y carruajes había que reparar sobre la marcha, así como los objetos y cruces y las mulas y jumentos se despeñaban y caían por los malos pasos y riscos del accidentado camino.

06:00 Desayuno y continuación de la marcha

08:00 Salida hacia Mengíbar

10:00 Llegada y visita

El actual emplazamiento de Mengíbar debió tener origen en una pequeña villa romana o posteriormente una arquería musulmana que iría creciendo al decaer el gran núcleo de Iliturgi, ciudad cercana a Mengíbar y de gran importancia, con el paulatino traslado de su población. Los investigadores coinciden en señalar que Mengíbar fue una de las poblaciones que asoló Fernando III en 1225 a la vuelta de Granada.

Desde su conquista perteneció a la Orden de Santiago. Los castellanos construyeron una importante fortaleza que tenía forma rectangular con torreones redondos en dos de sus esquinas y una torre cuadrada en el centro del lado Este, mientras la del homenaje, la única que queda en pie, se encontraba en el centro del patio.

Durante el reinado de los Reyes Católicos, la Orden de Santiago perdió sus privilegios y Mengíbar se inscribió institucionalmente en la ciudad de Jaén. En 1573 don Rodrigo Ponce de León, caballero veinticuatro de la ciudad de Jaén, compró el término de Mengíbar, pero los vecinos no lo aceptaron. Un año más tarde, fueron los propios vecinos los que solicitaron y obtuvieron la emancipación de Mengíbar de la jurisdicción de la ciudad de Jaén, mediante compra realizada a Felipe II.

12:00 Cruce del río Guadalquivir en balsas

Salida hacia Granada

Por fin dieron vista a la ciudad de Granada y su fértil vega el 17 de diciembre de 1504,ndespués de veinte días de un borrascoso, tempestuoso y accidentado viaje fúnebre, y fue entonces cuando Pedro Patiño, teniente del Mayordomo Mayor de Doña Isabel, "que era como el aposentado de su postrer viaje", mandó hacer alto para reorganizar las filas de la triste comitiva, y al mismo tiempo "cubrir con nuevos paños el féretro" y con ello disimular así los desperfectos del prolongado temporal, y tomar también un breve y necesario descanso.

Allí mismo la intendencia real repartió sesenta hachones de cera, "que pesaban once arrobas, entre los de mayor alcurnia y encopetados del cortejo funerario", y en silenciosa y ordenada comitiva, entregaron los mortales restos de Doña Isabel de Trastámara, a los frailes de San Francisco de Granada, que levantaron dos túmulos, uno en la Puerta Elvira y el otro en el camino del Realejo, en los cuales "se consumieron quinientas setenta y tres varas de frisas negras, y ante ellas entonáronse solemnísimos responsos.

13:00 Llegada a Granada y recepción por el Alcalde

14:00 Almuerzo

15:00 Visita a la Alhambra

Unas monedas acuñadas por la tribu de los túrdulos, allá por el siglo V antes de Cristo, son uno de los primeros vestigios del origen de la ciudad de Granada. Los romanos llegaron 500 años después y fundaron el municipio de Ilíberis. La leyenda dice que san Cecilio instaló su sede episcopal en el año 62 de nuestra era y Mohamed Ben Alhamar estableció el reino nazarí de Granada en el 1238.

Durante los dos siglos y medio siguientes, la ciudad alcanzó un altísimo nivel económico, cultural y artístico, culminando poco a poco la construcción de la Alhambra, uno de los monumentos más admirados y visitados del mundo.

La Alhambra. Denominada así por sus muros de color rojizo («qa'lat al-Hamra'», Castillo Rojo), está situada en lo alto de la colina de al-Sabika, en la margen izquierda del río Darro, al este de la ciudad, frente a los barrios del Albaicín y de la Alcazaba. Su posición estratégica, desde la que se domina toda la ciudad y la vega granadina, hace pensar que existían construcciones anteriores a la llegada de los musulmanes. Su conjunto, completamente amurallado, posee una forma irregular limitado al norte por el valle del Darro, al sur por el de la al-Sabika, y al este por la Cuesta del Rey Chico, que a su vez la separan del Albaicín y del Generalife, situado en el cerro del Sol.

Se tiene constancia por primera vez de ella en el siglo IX, cuando en 889 Sawwar ben Hamdun tuvo que refugiarse en la Alcazaba y repararla debido a las luchas civiles que azotaban por entonces al Califato cordobés, al que pertenecía Granada. Posteriormente, este recinto empezó a ensancharse y a poblarse, aunque no hasta lo que sería con posterioridad, ya que los primeros monarcas ziríes fijaron su residencia en lo que posteriormente sería el Albaicín. A pesar de la incorporación del castillo de la Alhambra al recinto amurallado de la ciudad en el siglo XI, lo que la convirtió en una fortaleza militar desde la que se dominaba toda la ciudad, no sería hasta el siglo XIII con la llegada del primer monarca nazarí, Mohamed ben Al-Hamar (Mohamed I, 1238-1273) cuando se fijaría la residencia real en La Alhambra. Este hecho marcó el inicio de su época de mayor esplendor.

Primero se reforzó la parte antigua de la Alcazaba, y se construyó la Torre de la Vela y del Homenaje, se subió agua del río Darro, se edificaron almacenes, depósitos y comenzó la construcción del palacio y del recinto amurallado que continuaron Mohamed II (1273-1302) y Mohamed III (1302-1309), al que también se le atribuyen un baño público y la Mezquita sobre la que se construyó la actual iglesia de Santa María.

A Yúsuf I (1333-1353) y Mohamed V (1353-1391) les debemos la inmensa mayoría de las construcciones de la Alhambra que han llegado a nuestra época. Desde la reforma de la Alcazaba y los palacios, pasando por la ampliación del recinto amurallado, la Puerta de la Justicia, la ampliación y decoración de las torres, construcción de los Baños y el

Cuarto de Comares, la Sala de la Barca, hasta el Patio de los Leones y sus dependencias anexas. De los reyes nazaríes posteriores no se conserva prácticamente nada. De la época de los Reyes Católicos hasta nuestros días podemos destacar la demolición de parte del conjunto arquitectónico por parte de Carlos V para construir el palacio que lleva su nombre, la construcción de las habitaciones del emperador y el Peinador de la Reina y el abandono de la conservación de la Alhambra a partir del siglo XVIII. Durante la dominación francesa fue volada parte de la fortaleza y hasta el siglo XIX no comenzó su reparación, restauración y conservación que se mantiene hasta la
actualidad.

La construcción de la catedral fue dirigida por los arquitectos Juan Gil de Hontañón y Enrique Egas y comenzó el 15 de marzo de 1523. La obra fue parada a causa de la peste poco después, pero recomenzó un año más tarde. Al clero, no les gustaron algunos aspectos de la catedral y después de un informe elaborado sobre el progreso de la construcción, Diego de Siloé reemplazó a Egas en marzo de 1528. Tenía que diseñar y presentar unos nuevos planes, utilizando lo que ya habían construido, y la construcción se reinició en octubre de 1528. La construcción de la catedral terminó en 1704, 180 años después de la colocación de la primera piedra fundamental. El diseño de la Capilla Real empezó en el año 1504 y fue construida entre 1505 y 1521 por Enrique Egas. Fue encargada por los Reyes Católicos para su propio mausoleo.

18:00 Marcha a pie desde el Convento de San Francisco a la Capilla Real acompañada de trompetas y timbales.

Las calles granadinas fueron alutadas y a su través "con muchas lágrimas y real pompa", según manifestó Pedraza, fue desfilando una interminable serie de caballeros, espoliques, criados y porteros, todos vestidos de bayeta de luto entre gallardetas de tafetán enarbolados sobre altísimos mástiles.

Granada y su Concejo no regatearon gastos, y ya dentro de las calles "el pueblo entero, rezando en voz alta, subió a la colina roja, desde las murallas hasta más allá del Campo de los Mártires, tras el triunfante pendón real, engalanado con flamantes borlas y cordones que pregonaban el paso de las cenizas de la victoriosa Señora de Andalucía".

En la que antes fue "Capilla real de los moros", en la Alhambra, estaba la "sepultura llana", que de acuerdo con lo dispuesto por la fallecida Reina Católica, se encontraba preparada como simple fosa de murete a base de ladrillos comunes, situados, "delante del altar mayor del franciscano cenobio". Enseguida se celebró un novenario de Misas y en él predicaron muchos obispos y arzobispos del Reino "alternando el altar con el púlpito". Dicen los cronistas que en estos cultos se gastaron "más de setenta arrobas de cera virgen". Y allí en la soledad de las tumbas quedó ya el cadáver de la Reina, tan movido y zarandeado durante el accidentado y largo viaje-entierro desde la ferial Medina del Campo hasta la reconquistada Granada, y muy sola quedó hasta que junto a ella fueron puestos los restos mortales de su regio esposo D. Fernando.

19:00 Conferencia en la Capilla Real

20:00 Instalación del campamento en el Colegio de San Nicolás

21:00 Cena y fiesta en Sacromonte

Domingo 18 Julio (Granada – Sevilla – Huelva – Navegación por el Atlántico)

07:00 Desayuno

08:00 Salida hacia Sevilla

10:30 Llegada y conferencia en el Patio de los Naranjos: “Hernando Colón y la Biblioteca Colombina”
12:00 Visita a la Biblioteca Colombina , la Catedral y el Alcázar. El origen de la antigua Hispalis romana es oscuro e incierto. Parece que debió ser un poblado tartesso, Ispal, instalado en el siglo VIII a.C. sobre una pequeña elevación del terreno a orillas del Guadalquivir. Hacia el 500 a.C., la civilización tartésica fue destruida por los cartagineses, que establecieron lazos comerciales con griegos y fenicios. Tras las Guerras Púnicas, durante el periodo de dominación romana, Hispalis fue un importante centro comercial y capital de la Bética romana. En el siglo III se produjo el martirio de las jóvenes alfareras Justa y Rufina, que más tarde fueron proclamadas patronas de la ciudad.

En tiempos de los visigodos, la ciudad se vio envuelta durante más de un siglo en continuas pugnas civiles entre cristianos y arrianos. Sobresalieron las figuras de San Leandro y San Isidoro, ambos obispos de la ciudad. En el año 712, la plaza fue conquistada por los árabes, que la llamaron Isbiliya, de donde procede su nombre actual.

Durante el periodo del Califato, pasó a depender de Córdoba, siendo una de las ciudades más importantes de Al-Andalus. En esta época, Sevilla experimentó un gran auge en ciencias, artes y comercio. Pasó también por las manos de los almorávides, en el siglo XI, que la embellecieron y organizaron grandes empresas en la ciudad. El 23 de Noviembre de 1248, tras un largo asedio, la ciudad cae en poder del rey Fernando III de Castilla, convirtiéndose en sede de la Corte. Las armas y el sello de Sevilla representan al rey San Fernando presidiendo un tribunal, con una espada desnuda levantada en la mano derecha y en la izquierda un globo del mundo, entre San Leandro y San Isidoro.

El descubrimiento de América supone un esplendor inusitado para Sevilla, impulsado por el río y el puerto. En 1503, los Reyes Católicos establecieron en ella la Casa de la Contratación, con facultades exclusivas en todo lo que se refiere al comercio con América. Se convierte entonces en una de las ciudades más importantes de occidente. El siglo XVII marca el declive de la ciudad, al pasar el monopolio del comercio americano a Cádiz.

La Biblioteca Colombina y Capitular. Hernando Colón, juntó la Biblioteca Colombina o “Hernandina”, como él quiso llamarla, entre 1496 y 1539, siendo considerada como una de las más grandes colecciones humanistas del Renacimiento. Sus fondos reflejan el producto de los mejores y más brillantes intelectuales de la época. La biblioteca original contenía 15.000 volúmenes coleccionados por este infatigable bibliófilo, Hernando Colón, que viajó por toda Europa comprando libros, como demuestra el Memorial de Juan Pérez, uno de sus más íntimos colaboradores: “Tuvo don Hernando, mi señor muy grande deseo de allegar muchos libros y aún todos los que pudiese hallar como lo puso por obra, y allegó y puso en su librería todos los más que hasta su tiempo se imprimieron y dejó renta para que siempre se comprasen los que demás se hallasen. Este deseo que tuvo tan intenso, fue y es digno de grande admiración, y de él resulta y siempre se seguirá provecho incomparable, aunque muchos inconsideradamente se han engañado no advirtiéndolo, pareciéndoles que sería mejor que estos dineros y tiempo, que en esta tan santa obra empleó, los empleara en cetrería o en otros ejercicios de caballeros...” Muchos de los materiales se han perdido a través de los siglos, pero un catálogo manuscrito de la colección original ha sobrevivido y fue publicado en forma facsimilar en 1992.

Hoy la Biblioteca Colombina está compuesta por 3.200 volúmenes, de los cuales, 1.250 son incunables, y 587 manuscritos, como la verdadera joya Libro de Profecías, de Cristóbal Colón.

La Biblioteca Capitular de Sevilla fue fundada cuando la ciudad fue conquistada a los Moros en 1248. En 1284, el rey Alfonso X, El Sabio, donó parte de su colección personal a la Catedral. Muchas otras donaciones han enriquecido los fondos de la Catedral a través de los siglos. Hoy la Biblioteca Capitular consta de 60.000 libros, mapas, manuscritos musicales del Renacimiento y Barroco, grabados y códices que se remontan al siglo XIII, muchos de los cuales son revelantes para la historia de América.

Los conquistadores llevaron a América la lengua, la literatura, las leyes, las costumbres y la cultura de la España del Renacimiento.

14:00 Almuerzo y Bienvenida del Alcalde de Sevilla

16:00 Salida hacia Huelva

18:00 Llegada y recorrido por los lugares colombinos

Conferencia en La Rábida: “Los cuatro viajes Colombinos”

Rábida en árabe significa "atalaya", refiriéndose a un puesto fronterizo, que es la función que debió prestar en tiempos de la dominación musulmana, antes de que los cristianos la convirtieran en monasterio en el siglo XIII, aunque también cumplía las funciones de refugio de caminantes, fortaleza contra piratas, lugar de estudios y hospital.

Cristóbal Colón llegó a este monasterio en el año 1484. Allí conoció a Fray Antonio de Marchena y a Fray Juan Pérez, este último confesor de la reina Isabel La Católica, de la que conseguiría la ayuda necesaria para la empresa que culminaría con el descubrimiento de América.

En sus estancias ultimó los detalles de la expedición con Martín Alonso Pinzón y otros expertos navegantes del cercano Puerto de Palos, en cuya Iglesia de San Jorge fue leída la pragmática que ordenaba la leva de las tripulaciones y de donde partieron la nao y las carabelas que cruzaron el Atlántico.

La Rábida está situada sobre una pequeña colina en la confluencia de los ríos Tinto y Odiel, frente a la Isla de Saltés. Las leyendas cuentan que allí se ubicaba originalmente el templo al dios fenicio Onus Baal, nombre del que proviene el antiguo nombre de Huelva, Onuba.

La Rábida, tal como la conocemos hoy, estuvo a punto de ser derribada en 1857 cuando el gobierno presidido por el general Narváez ordenó su demolición. El entonces gobernador de Huelva (Mariano Alonso) consiguió evitar este derribo. El Monasterio permaneció en estado de abandono hasta 1892, en que fue restaurado y entregado de nuevo a los frailes franciscanos.

20:00 Fiesta de despedida y embarque en el buque de la Armada Española “Galicia”

21:00 Salida hacia Lisboa

Cena y noche a bordo

Lunes 19 Julio (Navegación por el Atlántico – Lisboa)

08:00 Desayuno

09:00 Actividades académicas

14:00 Almuerzo

16:00 Actividades académicas

20:00 Llegada a Lisboa

21:00 Cena en el barco

22:00 Tiempo libre en Lisboa

Noche a bordo

Martes 20 Julio (Lisboa – Navegación por el Atlántico)

08:00 Desayuno

09:00 Recorrido histórico por la ciudad

Numerosas son las leyendas y fábulas que se ciernen sobre los orígenes de Lisboa. Así se atribuyó su fundación a Ulises o a los fenicios. Los primeros datos conocidos datan del siglo III a.C. cuando durante la conquista romana recibe el nombre de Olissipo, derivado de Alis ubbo o “ensenada amena”. Después de la época de Julio César, los romanos proclaman municipio a Lisboa, que es bautizada con el nombre de Felicitas Julia.

Desde el siglo V a. C. hasta el año 1147 cuando el rey Alfonso I Henriques recupera Lisboa ayudado por un ejército de cruzados, la ciudad sufre las invasiones de los pueblos bárbaros, visigodos y musulmanes. En 1248 inicia su reinado Alfonso III, que traslada a Lisboa la capitalidad del país y traza la cerca fernandina, que fija los límites urbanos rondando las 100 hectáreas. Para entrar en la ciudad por vía terrestre existen 6 puertas: al norte las de Santo Antao (donde desemboca la Carreira dos Cavalos), de la Mouraria y de Santo André; a oriente, la porta da Cruz; a occidente, la porta de Santa Catarina; y al sudeste la de Cata-que-farás. La mayor parte del movimiento de gente y mercancías se hace a través del Tajo.

En 1495 accede al trono Manuel I. Su reinado está unido a los más importantes descubrimientos y a los monumentos más notables de Lisboa, cuyo estilo es conocido con su nombre: manuelino. Se realiza una gran reorganización urbanística. Las riquezas provenientes del imperio permiten a la Corona financiar un vasto conjunto de obras públicas. La renovación urbana va a subrayar la capitalidad de Lisboa y trasladar definitivamente su centro político y económico hacia la zona ribereña. Se construye el nuevo Paço junto al Tajo.

Muchas familias nobles edifican nuevas residencias en la zona baja de la ciudad entre las que destaca la Casa dos Bicos dos Albuquerques. La principal arteria continúa siendo la Rua Nova dos Mercadores, donde se instalan los principales comerciantes de la ciudad. Junto al Paço existe aún la Ribeira Nova das Naus, donde son preparadas las embarcaciones con destino a la India. Fuera de los límites urbanos de la ciudad, junto a Belém, se construye el Mosteiro dos Jerónimos y la singular fortificación Torre de Belém.

El 8 de julio de 1497, zarpó de Lisboa la armada de Vasco de Gama a la India. La expedición estaba formada por dos naos, una carabela y una carta embarcación para transportar víveres, destinada a ser quemada en medio del viaje.

A mediados del siglo XVI la población de Lisboa llega a 100.000 habitantes. Los visitantes quedan admirados con la presencia de esclavos de las más variadas procedencias. El estuario del Tajo está repleto de embarcaciones portuguesas y extranjeras. Las grandes casas financieras europeas tiene filiales establecidas. Las construcciones iniciadas por Manuel I están casi todas concluidas y la ciudad se convierte en “la princesa del mar Océano”. Pero el abastecimiento de agua y los desagües siguen siendo un problema sin resolver y aparecen diversas epidemias de peste que diezman la población.

En 1531 un terremoto destruye gran parte de la ciudad. La peste y los terremotos se repetirían en 1723 y 1755 respectivamente.

14:00 Almuerzo

16:00 Continuación de la visita y tiempo libre

21:00 Cena en el barco

22:00 Salida hacia Oporto

Noche a bordo

Miércoles 21 Julio (Navegación por el Atlántico – Oporto)

08:00 Desayuno

09:00 Actividades académicas

14:00 Almuerzo

16:00 Actividades académicas

19:00 Llegada a Oporto

20:00 Cena

21:00 Tiempo libre en Oporto

Noche a bordo

Jueves 22 Julio (Oporto – Navegación por el Atlántico)

08:00 Desayuno

09:00 Recorrido por la ciudad

Se supone que la Calé o Portus Caleae de los romanos corresponde hoy con Villanova de Gaia. Durante la invasión de los bárbaros y por iniciativa de los alanos, se fundó el Castrum Novum en la orilla derecha del Duero. Ambas poblaciones fueron destruidas por Almanzor, y en el siglo XI inmigrantes francos y gascones reconstruyeron la ciudad en la ribera derecha, derivándose de aquí el nombre de Portus Gallorum.

14:00 Almuerzo

16:00 Salida hacia Villagarcía de Arosa

21:00 Cena

Noche abordo

Viernes 23 Julio (Villagarcía de Arosa - Padrón)

07:30 Desayuno

09:00 Información general de actividades en el Camino Marítimo del Mar de Arousa a Santiago

11:00 Desembarco en el Muelle del Ramal de Villagarcía de Arosa.

Recepción autoridades Villagarcía se halla situada, en primer término, en la cabecera Norte de O Salnés, una comarca natural cuyas características fueron celebradas desde los tiempos más antiguos por la fertilidad de sus tierras y la bondad de su clima. Pero Villagarcía es, ante todo, sinónimo de Arousa. Y Arousa es la mayor y la más bella de las Rías Gallegas.

El primer documento que se refiere a estas tierras data del año 912, cuando el obispo Sisnando las cede al poderoso Monasterio de San Martín Pinario. Durante siglos, los monjes ejercieron su dominio sobre la antigua Arealonga, hasta que en el siglo XIV una familia de hidalgos, los Caamaño, se asentó en Rubiáns (hoy parroquia de Villagarcía).

Unas veces aliados con el Arzobispo, otras con el Rey, y siempre con ventajosos enlaces matrimoniales por medio, los Caamaño se hicieron con el dominio de la próspera Arealonga para fundar, a mediados del siglo XV, el puerto y villa de Villagarcía.

12:00 Imposición de medalla al Programa Ruta Quetzal en el Auditorio.

Entrega ritual de la Vieira de la Ría de Arousa, símbolo del peregrino, a todos los expedicionarios, ofrecida por el Ecxmo Sr. Alcalde de Villagarcía, Joaquín Javier Gago Lorenzo.

14:00 Almuerzo ofrecido por el Consejo de Villagarcía de Arosa

17:00 Remonte del río Ulla hasta Padrón

La ruta marítimo-fluvial por la Ría de Arosa y el Río Ulla conmemora la llegada a Galicia, por mar, del cuerpo del Apóstol Santiago el Mayor, tras su martirio en Jerusalén en el año 44.

Santiago fue marinero y pescador de Galilea, apóstol de Cristo, evangelizador de Occidente y mártir.

El episodio de su muerte, ordenada por Herodes Agripa, se recoge en "los Hechos de los Apóstoles", de San Lucas. Antiguas tradiciones cristianas, reforzadas por varios textos medievales, aseguran que varios de sus discípulos recogieron el cuerpo de Santiago, lo amortajaron y trasladaron hasta la costa palestina. En el puerto de Jaffa un barco posiblemente mercante (una interesante hipótesis plantea el caso de una "Barca o Barco da Pedra," destinado al comercio regular de mineral de estaño con Oriente) lo trasladó, a través de todo el Mediterráneo y de la costa atlántica ibérica, hasta los confines de Occidente: el lugar donde había predicado el Evangelio. Los restos del Apóstol entraron en Galicia por la anchurosa Ría de Arousa y remontaron el Río Ulla, arribando a la ciudad romana de Iria Flavia (Padrón). El texto más importante que narra la Translatio del cuerpo apostólico, desde Jaffa a Iria y desde allí a su lugar de enterramiento, en Compostela, es el célebre Liber Sancti Iacobi, "Códice Calixtino", Libro III, capítulo 1, escrito en la primera mitad del siglo XII.
Por las tradiciones orales y los textos medievales que recogieron el acontecimiento, sabemos que, después de un largo viaje iniciado en el extremo oriental del Mediterráneo y concluido en el occidente del mundo conocido, Santiago se reencontraba definitivamente con la tierra donde había derramado el legado evangélico.

Parece significativo que la representación más antigua de la barca apostólica con el cuerpo de Santiago aparezca en una moneda del s. XII hallada en Adro Vello (O Grove, Ría de Arousa).

Los dos discípulos que acompañaron el cuerpo de Santiago hasta Galicia, Teodoro y Atanasio, tuvieron que aguzar su ingenio al enfrentarse con la terquedad de la reina Lupa y la furia de los romanos acantonados en la ciudad de Dugium (cerca de Fisterra).

Pero al final vencieron los peligros y lograron un lugar digno que sirviera de enterramiento a su maestro. El lugar elegido para situar el Sepulcro jacobeo, en las inmediaciones de una encrucijada de caminos, quedó cubierto durante siglos por la maleza del bosque Libredón.

Este silencio quedó roto en el S. IX, después que el monje eremita Paio y el obispo de Iria Flavia, Teodomiro, descubrieran la preciada Tumba y, con la ayuda del Rey Casto, reorganizasen el culto a Santiago el Mayor.

18:30 Llegada a la confluencia del río Ulla con el río Sar

Recepción de las autoridades e informe sobre Padrón – Iria Flavia y el Camino de Santiago

Entrega ritual del Bordón a todos los expedicionarios

Camino del río Sar y visita al “Pedrón” en la iglesia de Santiago Visita a la casa de Rosalía de Castro y cosecha de pimientos de Padrón (Capsicum Annum)

La historia de Padrón va ligada a la de Iría Flavia, que era una gran ciudad romana cuando, según la tradición jacobea, llegó a estas costas el cuerpo del Apóstol Santiago decapitado en Jerusalén. Según la misma tradición, la barca que lo traía atracó en e río Sar y fue amarrada a una piedra, o pedrón, que dio nombre a la nueva población.

Este pedrón es en realidad un ara romana que se conserva y expone bajo el altar de la iglesia parroquial de Santiago de Padrón.

Iria Flavia parece llevar el nombre de una palabra celta y el calificativo del emperador romano Flavio Vespasiano. El geógrafo Ptolomeo, en su Itinerario Romano, cita a Iria como capital de la tribu celta de los caporos, puerto de gran actividad comercial y residencia de cónsules y pretores romanos. Fue también la cabeza de una de las diócesis gallegas hasta su traslado a Compostela bajo la prelatura del obispo Dalmacio en 1095.

Una vez descubierto el sepulcro del Apóstol Santiago en Compostela, Padrón es el camino obligado para los peregrinos que acuden por mar, aunque al mismo tiempo es presa codiciada por vikingos y normandos en sus saqueadoras incursiones de los siglos X y XI. La construcción de las Torres de Oeste por el obispo Cresconio, en el XI, supuso un alivio para los padroneses y la villa alcanza su mayor prosperidad en los siglos XII y XIII.

20:30 Instalación del campamento en la huerta del Convento del Carmen

21:00 Cena y fiesta de recepción en Padrón

Sábado 24 Julio (Padrón – Santiago de Compostela)

07:00 Desayuno

08:00 Inicio de la marcha a pie hasta Santiago de Compostela. (22 km.)

11:00 Descanso en el Pazo de Faramello (Rois). Conferencia

14:00 Entrada a Santiago de Compostela por el Campus Sur universitario

14:30 Comida en la Carballeira da Ferradura.

16:00 Via Sacra por Rúa del Franco hasta “Fonte dos Bois”

Recepción del Illmo. Sr D. José Mª Diaz Fernández, Canónigo Archivero de la SMI Catedral de Santiago, que dará la bienvenida e informará sobre la tradición de la llegada del Cuerpo del Apóstol a Santiago, traído por un carro de toros, y recogerá para exponer en el Archivo catedralicio, el remedo – copia del cuadro "Traslación del cuerpo de Santiago el Mayor - Embarque en Jafa y Conducción en Galicia", cuyos originales figuran el Museo del Prado de Madrid – que Ruta Quetzal otorga, con una placa alusiva, al Cabildo de Santiago.

17:00 Subida a pie hasta el Monte do Gozo

Instalación del campamento y cena

20:00 Bajada a pie a la plaza del Obradoiro

23:00 Fuegos del Apóstol

Domingo 25 Julio (Santiago de Compostela)

08:00 Desayuno

09:00 Entrada caminando en Santiago de Compostela

Sobre el sepulcro del Apóstol, descubierto por Teodomiro en el siglo IX, se construye una gran basílica y un continuo flujo de viajeros y peregrinos se establece entre Santiago y el resto de Europa. Circula la fe, la cultura y la política. Santiago de Compostela y su Camino se convierten en “Raíz y fundamento de Europa”.

En el año 844, Ramiro I venció a los árabes en la batalla de Clavijo, cerca de Logroño.

Durante el combate se apareció un caballero montado en un caballo blanco blandiendo un estandarte blanco con una cruz roja y que, animando a los cristianos, arrasó el enemigo a su paso. Todos reconocieron en él a Santiago, el Santiago Matamoros de la iconografía.

La Reconquista ha encontrado por fin su Santo Patrón y en adelante “Santiago y cierra España” será el grito de batalla cristiano. Más tarde el señor de Pimentel, durante un combate contra los árabes, se vio obligado a atravesar a nado un brazo de mar; cuando salió, su cuerpo estaba cubierto de conchas. Así la vieira se convierte en emblema de la peregrinación y en el símbolo tangible que todo peregrino debe llevar.

A partir del siglo XI Santiago de Compostela conoce un extraordinario desarrollo.

Cuando el poderío turco hace peligroso el viaje a Tierra Santa, la peregrinación jacobea es tan meritoria como la de Jerusalén y la de Roma. El Santuario de Compostela ejerce una influencia especial en Francia: los abades de Cluny, llamados por los reyes de Navarra para reformar la orden benedictina, y luego los de Citeaux, toman a su cargo la organización de la peregrinación. Cuando la fiesta de Santiago, el 25 de julio, coincide en domingo, es el Año Santo Compostelano.

14:00 Almuerzo en bolsa y tiempo libre

19:00 Conferencia

21:00 Cena en Monte do Gozo

Lunes 26 Julio (Santiago de Compostela - La Coruña)

08:00 Desayuno

09:00 Marcha a pie hasta la catedral

Catedral. La actual catedral fue construida entre los siglos XI y XIII, pero la primera iglesia fue edificada a comienzos del siglo IX, Alfonso III mandó levantar en el lugar de esta modesta iglesia un monasterio y un templo, que fueron destruidos durante la invasión de Almanzor (997).

La fachada del Obradoiro fue construida por Fernando de Casas y Novoa en 1750, de grandioso estilo barroco se eleva ante la catedral con su gigantesca escenografía. Tiene tres cuerpos ricamente ornamentados, rematados en triángulo, más elevado el central.

Detrás de los laterales se levantan dos esbeltas torres gemelas que completan a la perfección el ritmo ascendente de la fachada en el que el juego de rectas y curvas logra maravillosos efectos de luz y sombra.

La Cripta (Catedral Vieja) fue construida en el siglo XI para compensar el desnivel y poder sustentar el Pórtico de la Gloria, una de las más valiosas obras del románico universal, realizada por en el siglo XII por el Maestro Mateo. Su acceso se halla parcialmente oculto por la gran escalinata de la fachada del Obradoiro. Se trata de una pequeña iglesia románica de planta de cruz latina con hermosas columnas y capiteles tallados

10:00 Misa de ofrenda al apóstol Santiago con botafumeiro

12:00 Salida hacia La Coruña

Ya era una ciudad importante de la Hispania romana, cuando se construyó en el siglo II la torre de Hércules, el faro más antiguo del mundo que existe hoy en funcionamiento.

Originariamente estuvo rodeado de una rampa exterior, transformada en escalera interior en época de Carlos III (1790), en la que se añadió el revestimiento de piedra.

Desde lo alto (104 m.) se puede divisar la bahía y la ciudad.

Las murallas se levantaron en el siglo XIII, pero sufrieron varias reformas hasta ser transformadas en el XVIII en un sistema defensivo a la Vauban, que se prolonga en el fuerte de San Antón.

De La Coruña partió en 1588 la gloriosa Armada Invencible y a su puerto volvieron después de la derrota sus ruinas. En 1589 La Coruña sufrió un asalto del pirata Drake; cuando los ingleses escalaban las murallas, María Pita derribó el portaestandarte inglés que entraba ya en la ciudad y, arrancándole la bandera, dio la voz de alarma: la ciudad estaba salvada. La plaza del Ayuntamiento lleva hoy el nombre de esta heroína y una placa conmemora su hazaña en la casa donde vivió.

15:00 Llegada y almuerzo

16:30 Visita a la exposición “Vacunas para todos”, Bicentenario de la Expedición Balmis-Salvany.

El 30 de noviembre de 1803, partió del puerto coruñés la “Real Expedición Filantrópica de la Vacuna”, que iba dirigida por Francisco Javier Balmis. El equipo estaba formado por tres médicos ayudantes, José Salvany y Lleopart, Manuel Julián Grajales, Antonio Gutiérrez Robredo, dos practicantes y tres enfermeros.

Para asegurar que tendría la vacuna de la viruela en La Coruña, Balmis salió de Madrid con 10 niños de la Casa de los Desamparados, que fue vacunando sucesivamente durante el viaje. Pero para asegurar el éxito del transporte hasta América necesitaba 22.

Los niños eran necesarios para conservar el virus vacunal; cada semana se inoculaban dos de ellos con el material obtenido de las pústulas de los vacunados la semana anterior. Isabel Cendala y Gómez, rectora del hospicio coruñés, los acompañó y cuidó durante la travesía. Su entrega y dedicación la convirtieron en la primera mujer que participó oficialmente en una expedición marítima.

La expedición de la viruela gozó de gran reconocimiento y valoración en la misma época de su realización. Edward Jenner (descubridor de la vacuna contra la viruela) afirmó en 1806: "No me imagino que en los anales de la historia haya un ejemplo de filantropía tan noble y tan extenso como éste". Y Humboldt escribía en 1825: "Este viaje permanecerá como el más memorable en los anales de la historia”.

Se considera que entre las expediciones científicas promovidas por los reyes españoles, ésta fue la más noble y humana, pues vacunó a cientos de miles de personas consiguiendo protegerlas contra la viruela. Hasta esa época, la enfermedad mataba, desfiguraba o incapacitaba a una parte muy importante de la población. Además, por orden real, la vacuna no podría ser objeto de comercio ni beneficio particular alguno.

La financiación y equipamiento de una expedición resultaba muy costosa, tanto por la cantidad de personas que movilizaba como por los intereses económicos que creaban. Y uno de los gastos principales era el de los barcos empleados. La corbeta María Pita fue la embarcación que se utilizó para cruzar el Atlántico y para llevar la vacuna hasta Méjico; pero, en total, se emplearon cinco barcos.

La expedición llevaba un botiquín con 2.000 pares de vidrios para mantener el fluido vacuno, una máquina neumática, 4 barómetros, 4 termómetros y 6 libros en blanco para registrar los trabajos realizados. También llevaban 500 ejemplares de la versión española del “Tratado histórico y práctico de la vacuna” de Moreau de la Sarthe, traducida por Balmis, para distribuir gratuitamente al personal médico ultramarino.

Francisco Javier de Balmis, director de la "Real Expedición Filantrópica de la vacuna" regresó a España en 1806, tres años después de su partida. José Salvany permaneció en América del Sur difundiendo la vacuna contra la viruela hasta 1810, cuando murió mientras intentaba llevarla a Buenos Aires. Ambos son los artífices de la primera campaña de vacunación masiva en la historia de la medicina.

20:00 Cena

Martes 27 Julio (La Coruña – Madrigal de las Altas Torres)

08:00 Desayuno

09:00 Salida hacia Madrigal de las Altas Torres

14:00 Llegada y almuerzo

16:00 Recorrido cultural


La villa de Madrigal tiene en la baja edad media su época dorada. A principios del siglo XV el joven monarca Juan II instala en ella una residencia en la que se refugia del ambiente cortesano. Hasta tal punto es del gusto del monarca que la entrega como regalo de boda a su primera esposa, María de Aragón. Ésta residió largas temporadas en Madrigal y aquí enterró a su hija, la infanta Catalina, en 1424. A esta reina también se debe la fundación del Real Hospital de la Purísima Concepción en 1442.

En Madrigal se celebran las Cortes 1438 hecho que, por ser poco habitual en este monarca, revela la importancia de la villa. Tras morir su primera esposa, Juan II vuelve a contraer matrimonio en 1447 con Isabel de Portugal, celebrándose la boda en la iglesia de San Nicolás de Bari.

El nuevo matrimonio no cambió las costumbres del anterior, y aquí, en Madrigal, en el Palacio de Juan II, nació Isabel la Católica el 22 de abril de 1451. Bautizada en la misma iglesia, la infanta residió en Madrigal hasta 1456 y volvió repetidas veces a la villa a lo largo de su vida. De hecho, en esta villa encontró refugio frente a su hermano - Enrique IV- y años después, ya reina, convocó las primeras Cortes de su reinado.

18:30 Conferencia

20:00 Cena

21:00 Concierto

Miércoles 28 Julio (Madrigal de las Altas Torres - Segovia)

08:00 Desayuno

09:30 Salida hacia Segovia

11:00 Llegada y recorrido cultural por la ciudad

El Acueducto sigue siendo una de las obras de ingeniería civil más sorprendentes de nuestro país. Construido entre los siglos I y II para conducir el agua de los neveros de la Sierra da Guadarrama hasta el núcleo de población asentado en la roca, está realizado con robustos sillares de granito unidos sin mortero en argamasa, y alcanza su mayor altura (28,10 m) en la doble arquería de la Plaza del Azoguejo. Desde este punto arranca la antigua Calle Real, arteria principal de Segovia, reúne un interesante conjunto arquitectónico. En su primer tramo dos bellos edificios del siglo XV la Casa de los Picos que debe su nombre a la original decoración de puntas de diamante de su fachada, y el Palacio del Conde Alpuente, un sólido edificio decorado con esgrafiado y ventanas
rematadas con delicada tracería gótica.

Plaza de San Martín. Resuelta en una sucesión de plataformas escalonadas, muestra un nutrido grupo de singulares edificaciones, entre las que destaca la Iglesia románica de San Martín, primitiva construcción de planta cuadrada a la que se añadieron en los siglos XII y XIII crucero, ábsides y atrios sostenidos por columnas de labrados capiteles.

La Calle Real desemboca en la Plaza Mayor, espacio porticado presidido por el Ayuntamiento, típica construcción del XVII con fachada de granito y torres rematadas por chapiletes . Domina el conjunto, el majestuoso ábside de La Catedral erizado de pináculos.

La Catedral, de estilo gótico tardío comenzó a construirse en 1525 con la colaboración desinteresada de los segovianos y la dirección de la familia Gil de Hontañón. Sustituyó a la primitiva románica destruida en 1521 durante el levantamiento comunero. Su espléndido ábside, la portada del Perdón, cerrando los pies del templo, y su esbeltísima torre de 90 metros de altura son sus elementos externos más atractivos. Su interior, definido por la grandiosidad y armonía de proporciones, se desarrolla en tres naves con crucero, ábside semicircular en la cabecera y girola rodeada de capillas. El claustro relacionado estilísticamente con Juan Guas, procede de la antigua catedral.

Alcázar. Edificado sobre construcciones defensivas anteriores, su actual fisonomía gótica y palaciega se debe a la acción de los monarcas Juan II y Enrique IV. Dan carácter a su perfil, la torre de Alfonso X el Sabio la más robusta de Juan II con sus doce castilletes y los chapiteles de pizarra añadidos por Felipe II. En el interior en torno al Patio de Armas y al Patio del Reloj se articulan sus diferentes espacios.

La Judería. El Barrio judío se extendía desde el costado sur de la catedral hasta las murallas. Tras la expulsión de sus moradores, experimentó una profunda transformación al ir perdiendo progresivamente sus edificios más representativos. Conserva en su trazado urbanístico, de angostas y serpenteantes calles, su impronta oriental. En él se encuentra la Casa del Sol construida en un antiguo baluarte de la muralla actual sede del Museo de Segovia. Muy cerca de el, se abre la Puerta de San Andrés flanqueada por dos macizas torres.

14:00 Almuerzo

16:00 Continuación del recorrido

18:00 Actividades académicas

20:00 Cena

Jueves 29 Julio (Segovia - Madrid)

08:00 Desayuno

09:00 Salida hacia el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

Considerado la octava maravilla del mundo, la peculiar arquitectura del monasterio, realizada por Juan de Herrera, crearía escuela, hasta el punto de que a partir de ese momento se denomina herreriana al tipo de arquitectura representada por este edificio.

Concebido por el rey Felipe II como panteón real, palacio y monasterio a mayor gloria del emperador Carlos V, su construcción se inició en el año 1563 y se terminó en 1584.

El edificio recibió el nombre de San Lorenzo para conmemorar la victoria en la batalla de San Quintín, ocurrida el día de San Lorenzo.

Juan de Toledo fue el encargado de iniciar las obras siguiendo el modelo del Alcázar de Toledo, es decir, una planta cuadrada con una torre en cada ángulo. El edificio se dividió en tres zonas verticales, con el patio de los Reyes en el centro, así llamado por las estatuas de los reyes de Judá que decoran su fachada. Tras la muerte de Juan de Toledo en 1567, fue Juan de Herrera el encargado de continuar con las obras.

11:00 Acto de clausura del Programa Académico

14:00 Almuerzo en la Plaza de Oriente

16:00 Visita al Palacio Real y al Museo del Prado

Palacio Real. El Palacio Real de Madrid es la residencia oficial de Su Majestad el Rey de España, que lo emplea en las ceremonias de Estado, aunque no habita en él. El origen del palacio se remonta al siglo IX en el que el reino musulmán de Toledo construyó una edificación defensiva que después usaron los reyes de Castilla, sobre la que en el Siglo XVI, se construyó el Antiguo Alcázar. Destruido este por un incendio en la Nochebuena de 1734, Felipe V quiso que el Palacio Nuevo ocupase el mismo lugar. Toda la construcción se hizo abovedada, en piedra y ladrillo, sin madera, para que ningún incendio pudiera destruirlo. Las obras se realizaron entre 1738 y 1755, estableciendo Carlos III su residencia en él en 1764.

La decoración del Palacio Real de Madrid ha ido cambiando con el paso del tiempo según los diferentes estilos artísticos de cada momento. Del reinado de Carlos III se conservan el Salón del Trono, la Cámara del Rey (o de Gasparini) y la Sala de Porcelana, obra de la Real Fábrica del Buen Retiro.

Además de las salas donde habitó la Familia Real de Alfonso XIII, el Palacio alberga una selecta Galería de Pinturas, con importantes obras como el Políptico de Juan de Flandes, Salomé de Caravaggio, Caballo de Velázquez o diversas realizaciones de Goya; también se exhiben importantes instrumentos musicales, como el cuarteto realizado para el rey de España por Estradivarius y la importantísima colección de armaduras de la Real Armería.

Museo del Prado. La primera idea de crear un Museo en Madrid le fue sugerida a Carlos III por su pintor de cámara y consejero en temas artísticos Antón Rafael Mengs. Pero el deseo del pintor no pasó de sugerencia, al no hacerlo suyo el monarca.

Ya en los últimos años del mismo siglo XVIII la creación, en el París de la Revolución, del Museo del Louvre, en el propio Palacio real del Louvre y con los fondos de las colecciones reales, fue el punto de partida para la creación de muchos museos en Europa. La primera iniciativa seria y oficial de fundación de un museo similar en Madrid, se debió al rey José I Bonaparte, empeñado en la creación de un Museo Josefino que no pasó del papel, en 1809, en plena Guerra de Independencia
precisamente contra el dominio francés.

La idea prendió en el reinado de Fernando VII que supo prestar oídos a las peticiones, en ese sentido, de la Real Academia de Bellas Artes y al especial interés que puso en el proyecto su segunda esposa María Isabel de Braganza, a la que el Museo ha querido considerar siempre como su fundadora. Su escultura sedente, obra neoclásica de Álvarez Cubero, parece estar recibiendo a los visitantes en el vestíbulo de la Puerta de Velázquez de la entrada oeste del Museo. Lamentablemente la reina murió sin poder ver la inauguración del que se llamó Museo Real de Pintura y Escultura, y que tuvo lugar el 19 de Noviembre de 1819.

El Museo del Prado es una de las pinacotecas más importantes del mundo. Alberga más de 6.000 obras de arte reunidas especialmente por los reyes de las Casas de Austria y de Borbón. Además de su imprescindible colección de pintura española, posee varias colecciones pintura flamenca reunidas por los Reyes Católicos, así como una destacada colección de pintura italiana, formada por el emperador Carlos V y Felipe II.

20:00 Cena en el campamento

21:00 Fiesta de despedida en el campamento

Viernes 30 Julio (Madrid)

08:00 Desayuno y fin de la expedición

 

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